Pautas para un buen manejo del transporte de cerdos
La bioseguridad durante el traslado de porcinos es clave para evitar la transmisión de patógenos entre distintos establecimientos.
Por: Senasa
Fotos: Banco de imágenes
Ante la presencia de enfermedades que pueden afectar la producción porcina, como la enfermedad de aujeszky (EA) y brucelosis porcina, es necesario tener en cuenta algunas consideraciones para reforzar la bioseguridad en el transporte de porcinos.
Los camiones, acoplados y carros que transportan animales son de alto riesgo para la producción porcina, ya que pueden transmitir patógenos de un establecimiento a otro. Por lo tanto, para fortalecer la bioseguridad y el control preventivo, es importante conocer cómo trasladar a los animales, cuál es la manera correcta para ingresarlos o descargarlos en las granjas, de qué forma se deben limpiar y desinfectar los vehículos,
Así, para evitar el ingreso de enfermedades a las granjas a través del camión y/o del chofer, el transporte no debe ingresar al perímetro de bioseguridad y la carga y descarga de los animales se debe realizar en un sector exclusivo del establecimiento (sector de cargas).
Lavado y desinfección
Previo al ingreso, es fundamental lavar el transporte y desinfectarlo. La manera más efectiva de hacerlo es cumpliendo con los siguientes pasos:
- Limpiar la materia orgánica grosera con agua a presión y cepillo o escoba.
- Realizar una segunda limpieza con detergente y agua.
- Aplicar un desinfectante, respetando las indicaciones de la etiqueta.
- Dejar secar para volver a utilizar el transporte.
En el caso de Argentina, la higiene de estos vehículos debe hacerse en lavaderos habilitados en el Senasa o en los lavaderos de las plantas de faena.
Es importante al momento de la carga, solicitar al conductor del vehículo el Certificado Único de Lavado y Desinfección de Transporte de Hacienda y verificar que se haya realizado correctamente.
Requisitos técnicos para el transporte de cerdos
De acuerdo a lo expuesto en el artículo 13 de la Resolución 503/2022 del Senasa, los vehículos destinados al transporte de animales vivos y mercancías de origen animal deben estar diseñados y construidos de manera que los animales puedan ser embarcados y desembarcados fácilmente, evitándoles todo tipo de deterioro físico.
- Especificaciones de la carrocería
Los pisos deben ser de material resistente, impermeable, que faciliten su lavado, desinfección y limpieza de los residuos líquidos y sólidos, sin aberturas hacia el exterior. Para la especie porcina deben ser de material rígido con nervaduras que le confieran propiedad antideslizante.
Las puertas deben estar dispuestas en forma tal que faciliten la entrada y salida de los animales. Deben tener un ancho libre mínimo de NOVENTA CENTÍMETROS (90 cm) y una altura libre mínima de CIEN CENTÍMETROS (100 cm) para que los animales a ser transportados no lesionen su dorso o golpeen sus cabezas al ingresar o salir del transporte. Los rodillos giratorios deben tener un diámetro mínimo de SEIS CENTÍMETROS (6 cm). El rodillo deberá iniciar a una altura del piso de VEINTE CENTÍMETROS (20 cm), con un largo total de SESENTA CENTÍMETROS (60 cm).
Los laterales deben ser lisos, sin grietas, ni roturas, ni salientes, fáciles de lavar y desinfectar, y estar cerrados hasta una altura de OCHENTA CENTÍMETROS (80 cm) más/menos VEINTE CENTÍMETROS (20 cm) a contar desde el nivel del piso. Contar con aberturas de ventilación longitudinales, a cada uno de sus lados, las cuales podrán ser continuas o lograrse a través de perforaciones circulares.
Cara interna: sin ganchos, tornillos, tuercas o cualquier saliente que pudiera dañar a los animales.
Zócalos: la unión del piso al lateral debe impedir el escape de purines al exterior, cerrando todo el perímetro, permitiendo la fácil remoción de la materia orgánica durante el lavado.
Protector: en aquellos casos que sea necesario proteger a los animales por razones climático -ambientales o de bienestar animal, deben tener techo protector o cubierta adecuada desmontable.
Separaciones internas: ser lisas, sin grietas, ni roturas, ni salientes, fáciles de lavar y desinfectar.
Condiciones para el embarque y transporte
El número de cabezas según especie, categoría, clasificación o peso vivo, que corresponde cargar en los distintos medios de transporte y que se movilizan en condiciones óptimas, debe guardar estrecha relación con el volumen/superficie disponible del vehículo, no debiendo sobrepasar el límite máximo de carga según la especie.
En el caso del transporte de cerdos, se debe tener en cuenta la siguiente tabla: