CALIDAD Y TRAZABILIDAD

CALIDAD Y TRAZABILIDAD
En la actualidad, el concepto de calidad es entendido internacionalmente como la totalidad de las características de un producto-servicio, que le confieren la capacidad de satisfacer las exigencias establecidas e implícitas de clientes y consumidores.A la hora de elegir, clientes y consumidores privilegian valores explícitos que pueden vincularse con atributos organolépticos (sabor, aroma, color, textura, terneza, etc.), nutricionales (por ejemplo los naturalmente presentes por ser el resultado de los propios sistemas de producción), funcionales (facilidad de uso, transporte y conservación) y comerciales (etiquetado, aspectos sanitarios, entre otros factores). Pero teniendo siempre en cuenta que, aunque la totalidad de estos valores del alimento deleiten al demandante, no serán suficientes si no es posible brindar una garantía cabal de la característica propia, única e implícita: su inocuidad o seguridad.Estos valores explícitos hacen referencia a características tangibles, basadas en criterios objetivos y mensurables que deben ser adecuadamente respaldados. Pero la percepción que el cliente tiene de los alimentos, no sólo está asociada al producto físico, sino también a otros atributos de valoración vinculados a preferencias y comportamientos por parte de distintos segmentos y grupos de consumidores.En este sentido se puede afirmar que la calidad entendida como valor no sólo está asociada al producto, sino cada vez más a la información que clientes y consumidores posean del mismo. Estos dos conceptos definen el valor del producto percibido por el cliente.Philip Kotler, un referente ineludible a la hora de pensar en cómo atender a clientes y consumidores, sostiene que "la mayor recompensa será para aquellas compañías que inventen maneras de crear, comunicar y ofrecer valor a sus clientes". Crear, comunicar y ofrecer valor, no son más que la incorporación de conocimiento: conocimiento amplio sobre las necesidades y preferencias de clientes y consumidores.GARANTIA DE VALOR Para garantizar que los alimentos presentan efectivamente los atributos de valor demandados por clientes y consumidores es necesario contar con sistemas de gestión e identificación adecuados. Fundamentalmente, cuando los atributos de valor no pueden ser comprobados directamente por clientes y consumidores, dado que son el resultado de numerosas condiciones y decisiones a lo largo de la cadena agroalimentaria.En este sentido el concepto de trazabilidad cobra una enorme relevancia. La posibilidad de encontrar y seguir el rastro, a través de todas las etapas de producción, transformación y distribución, de un alimento, un pienso, un animal destinado a la producción de alimentos o una sustancia destinados a ser incorporados en alimentos o piensos o con probabilidad de serlo, es una necesidad y una exigencia cada vez más fuerte en la comercialización de alimentos.El conocimiento y la experiencia han demostrado que la generación de valor no es un fenómeno que pueda lograrse individualmente, sino el resultado de un proceso de acción colectiva que se aplica a toda una cadena, o bien a todo un sistema agroalimentario.La calidad con trazabilidad de los alimentos es una exigencia actual de parte de los clientes y de los Estados, una herramienta para hacer uso eficiente de los medios y recursos de las empresas, y una oportunidad de integrar la cadena agroalimentaria con el objetivo de brindar verdadero valor a clientes y consumidores.Hoy más que nunca en el sector agroalimentario, el éxito no es para los que piensan que pueden hacer algo, sino para quienes lo hacen.*Ingeniero en Alimentos- Master en Agribusiness -Gerente de Desarrollo de ORGAINVENT LATINOAMERICA

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