ARGENTINA: PATY PASARIA A MANOS DE FRIGORIFICO BRASILERO
Los dueños de la mayoría accionaria del frigorífico Quickfood, fabricante de las tradicionales hamburguesas Paty y uno de los mayores exportadores de carne de la Argentina, estudian una oferta de compra presentada por el grupo brasileño Marfrig. Aunque no trascendió el monto de la operación -rige entre las partes un acuerdo de confidencialidad-, fuentes del sector estimaron que el valor de la operación rondaría los US$ 300 millones. La transferencia, que se haría en dos pasos -primero por el 60% del paquete mayoritario y luego por el resto- podría concretarse en un mes y medio.
Así, si finalmente se concreta la venta, la última joya de la industria frigorífica de capital nacional podría pasar a manos brasileñas. En los últimos dos años, varias compañías locales fueron adquiridas por grandes jugadores del sector, principalmente de Brasil y Estados Unidos. De hecho, la Argentina sería un nuevo escenario de competencia para los dos principales grupos frigoríficos brasileños, Marfrig y JBS (dueño aquí de Swift Armour).
Marfrig, que tiene nueve plantas faenadoras y procesadoras en América del Sur, ya había comprado en la Argentina el frigorífico AB&P, de la localidad de Hughes, provincia de Santa Fe. También tiene una participación en Estancias del Sur, de Córdoba. Además de Brasil, su presencia se extiende a Uruguay y Chile. Sumadas todas sus plantas, faena diariamente 9000 cabezas. La facturación anual del grupo supera los US$ 1000 millones.
Fundada en 1960, Quickfood fue el introductor de las hamburguesas en el mercado con la marca Paty, nombre que con el tiempo se convertiría en un genérico para designar ese producto. Actualmente lidera el mercado de las hamburguesas con el 60% de participación y es segundo en el de salchichas, con su marca Patyviena. Además, es el primer exportador de cortes enfriados y congelados y en los últimos tres años se ubicó siempre ente los dos principales exportadores de carne de cuota Hilton a Europa.
En total, suma exportaciones por US$ 110 millones al año. Desde 1987 llega con sus productos a mercados tan diversos como el Caribe, Islas Canarias, Hong Kong, Chile, Perú, Estados Unidos, Taiwan, Canadá, y Uruguay.
En el último balance, declaró una facturación anual de 850 millones de pesos. Tiene 1600 empleados, cuatro plantas (dos de faena y dos de procesamiento) en tres provincias y una en Uruguay. Faena entre 1300 y 1400 cabezas por día. Recientemente abrió un restaurante premium en Barcelona, Patagonia Beef and Wine.
La versión de una posible venta de la empresa argentina circuló con fuerza la semana pasada, pero había sido desmentida por la familia Bameule, fundadora y controlante de la mayoría accionaria. Según ese rumor, JBS y Marfrig estaban pujando por quedarse con la firma. El grupo JBS negó haber hecho una oferta formal.
Nota a la Bolsa
Ayer, ante la consulta de la Bolsa de Comercio sobre estas versiones, la compañía envió una nota firmada por su vicepresidente, Miguel Gorelik, en la que afirmó: "Hemos consultado a los accionistas controlantes del capital social de Quickfood SA (la familia Bameule), quienes nos han informado que han recibido una oferta confidencial para la adquisición de su tenencia accionaria en Quickfood, la cual se encuentra sujeta y condicionada a la realización de un due diligence , a la aprobación de la operación por parte de la asamblea general y el consejo de administración del eventual comprador, a la negociación y acuerdo entre los accionistas controlantes y el eventual comprador sobre los términos y condiciones del contrato de compraventa y otras condiciones de cierre".
El 45% del capital de la firma cotiza en la Bolsa y el resto está en manos de los accionistas controlantes. Dada la fuerte escalada del precio de la acción luego de conocido el comunicado, la Bolsa suspendió momentáneamente ayer su cotización. En los últimos días, a causa de los rumores de venta, la acción pasó de 7,50 a 9 pesos. Según esos datos, el valor de mercado de la firma -la cotización, multiplicada por la cantidad total de acciones- asciende a 200 millones de pesos sólo por la porción del capital que cotiza en el mercado de valores.
Por Swift Armour, el también brasileño grupo JBS -más conocido por su marca Friboi- pagó 200 millones de dólares; más recientemente, esta firma brasileña también se quedó con dos plantas faenadoras de la quebrada CEPA (por US$ 43 millones en total) y una de Consignaciones Rurales (por US$ 17 millones).
Fuente: LA NACION
Por José Crettaz
De la Redacción de LA NACION
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