SOLO AVES & PORCINOS EDICION Nº 23: PLANTA MODELO / FEPASA UNA HISTORIA SOBRE EL EXITO

Su planta se encuentra en la reverdecida ciudad de Concepción del Uruguay, justo sobre el antiguo trazado de la Ruta Nacional 14 que atravesaba la provincia de Entre Ríos. Desde allí, FEPASA envía sus productos a gran parte del país y a varios destinos del mundo. Pero su presente no siempre ha sido así, muchos sucesos pasaron para que se convirtieran en lo que hoy son.

FEPASA nació en 1964 por iniciativa de un grupo de productores avícolas de la ciudad de Concepción del Uruguay, que decidieron crear una planta procesadora de aves. Muchos de ellos habían comenzado el engorde de pollo en pequeños galpones, con baja escala, pero en el momento de la constitución de la nueva firma ya habían avanzado a ser granjas de medianas dimensiones, manteniéndose en una sostenida expansión de la producción.

Con la puesta en marcha de ese proyecto, este grupo de productores transformó su producto pasando de la comercialización del pollo vivo a la venta de su producción faenada en forma directa a los centros de consumo. Desde aquellos años se produjo una transformación importante y constante, ya que de producciones familiares pasaron a ser una empresa que comenzó a hacer su propia crianza y a integrarse verticalmente, incorporando todas las etapas productivas a su actividad.

Hoy, FEPASA posee Granjas (propias) de Reproductores, Planta de Incubación, Fábrica de Alimentos Balanceados, engorde de pollos en Granjas Integradas, Planta Frigorífica, Laboratorio, y Planta de Rendering, con una distribución geográfica importante en la distribución de sus productos. Para la firma, es una constante el énfasis en la bioseguridad, higiene, sanidad, tecnología y calidad de sus productos. Tanto es así, que sus productos son demandados en Unión Europea, Asia, Africa, y varios países de América.

ETAPAS

La empresa abarca todo el ciclo productivo de la actividad avícola. Eso significa, todos los procesos inherentes (controles, higiene, cuidado) a la Planta de Incubación, en donde se encuentran los huevos fértiles provenientes de gallinas altamente competitivas desde el punto de vista genético.

De esta manera, se proporcionan de modo continuo pollitos bebés a las granjas en donde se crían y engordan con alimento especial (producido en la Fábrica de Alimento Santa Rosa, perteneciente a FEPASA), en alrededor de 50 días. Transcurrido este período, las aves son transportadas por vehículos aptos hasta la Planta de Faena y Procesamiento, en donde se encuentra la mejor tecnología preparada para el trozado y deshuesado. Todo, realizado bajo estrictas normas de calidad e higiene que le permite exportar a exigentes mercados internacionales.

La Planta de Faena, tiene la capacidad de faenar a 20 millones de aves por año. El frigorífico tiene un área para el faenado y procesamiento de aves vivas en una línea de producción continua a una velocidad de 8300 pollos por hora. También cuenta con un sector para la elaboración y trozado de pollos junto a otra para saborizarlos.

Además, la firma cuenta con un túnel de enfriado que permite congelar 162 toneladas por día. Parte de la producción es destinada a las bocas de consumo distribuidas a lo largo y ancho del país, mientras que otra parte es destinada a la exportación a distintos sitios del mundo.

NORMAS Y MEDIO AMBIENTE

La firma utiliza varias normas, todas certificadas regularmente por SENASA, entre ellas las Buenas Prácticas de Manufactura (BPM), las Buenas Prácticas de Higiene (BPH), Procedimientos Operativos Estándar de Saneamiento (POES), las Normas HACCP, y es parte del Plan Nacional de Control de Residuos e Higiene en Alimentos (CREHA), en donde el SENASA toma muestras bimestralmente del producto que se elabora al que se le realizan pruebas.

La firma, es conciente de su rol como actor que interactúa con la naturaleza. Por eso, ha incorporado capacitación y modernas tecnologías para proteger el medio ambiente y evitar el riesgo de contaminación. En ese sentido, poseen plantas secundarias de subproductos en donde aprovechan integralmente todos los productos sólidos, transformándolos en harinas y aceites.