Porcinos / Reconversión<br>OPCIÓN PARA LAS ECONOMÍAS REGIONALES

Una de las opciones para extender un proceso de diversificación o reconversión productiva es ampliando las fronteras comerciales con un abanico de posibilidades que nos ofrece la naturaleza y que se descubren las potencialidades no consideradas en toda su extensión, como para enfrentar las reformas estructurales para motorizar el desarrollo de las economías regionales. En tal sentido la producción porcina comienza en el mundo con el asentamiento del humano en comunidades y es el cerdo uno de los primeros animales domesticados, que lo transforman a través de los años, en la carne más consumida en el mundo con casi 90.000.000 de toneladas anuales, superando ampliamente a las carnes aviar, bovina, entre otras. Los datos que muestran la producción de los últimos 5 años y el proyectado para el año en curso están reflejados en el cuadro Nº 1Dentro del contexto mundial donde se destacan por su producción China, la UE, EE.UU. y Brasil, nuestro país en el contexto internacional ocupa el lugar 55 y en Latinoamérica el 3° puesto, después de Brasil y Chile.AL TOPE EN EL MUNDOLa carne de cerdo, desde hace varios años, es la más consumida en el ámbito mundial.Las bondades nutricionales, los requerimientos productivos, el desarrollo del campo tecnológico, entre otros, simplifican el proceso de producción en toda la cadena, sumado a la sencillez de ser un animal monogástrico a diferencia del ganado bovino. Estos entre otros márgenes de diferenciación son los que permiten suponer que el consumo de esta carne continuará manteniéndose en el primer lugar por varios años más. No es menos cierto que, la demanda de los cortes de este alimento se encuentra en un crecimiento constante a razón del 2% anual, con un pronóstico alentador, que permite el desarrollo de programas de crecimiento en los países que lo puedan realizar y la Argentina está considerado uno de los elegidos, calificada por sus características y pautas culturales que la hacen sumamente atractiva por su capacidad productora. A nuestro país por tradición se la ubica como consumidor de carne vacuna, hoy ese consumo apenas supera los 62 kg. al año. En cambio Dinamarca consume más de carne de cerdo, que la Argentina carne bovina. Parte de la diferenciación se da en el consumo de carne fresca. El caso de China, reviste singular importancia dado por el impulso que impone su crecimiento económico y su condición demográfica que limita toda acción comparativa. Lo que se puede destacar es que este proceso se reproduce a los países menos favorecidos económicamente. Cabe señalar que en la medida que aumenta el poder adquisitivo se pasa de la proteína vegetal a la animal, siendo la carne de cerdo junto con la aviar, las primeras a las que se puede acceder por ser los productos más económicos y de rápida producción.PRODUCCION NACIONALLos datos de existencias de cerdos en nuestro país según el censo agropecuario nacional del año 2002 son los siguientes:Según datos de la Asociación Argentina Productores de Porcinos la realidad es que las cifras de stock estarían cercanas a las 1.700.000 cabezas. Entre las tres primeras provincias (Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe) tienen el 65% de la población, pero participan con el 75% de la faena y sólo Buenos Aires representa el 50% de la industria faenadora. Este hecho indica la importante concentración tanto del eslabón primario como del industrial. En los últimos años se ha producido una disminución de la cantidad de establecimientos dedicados a la producción que pasaron de aproximadamente 6.000 a un poco mas de 1.000 en la actualidad. También se produjo un proceso de transición en la especialización de la producción, pasando de ser una actividad alternativa o secundaria de la explotación agrícola, a ser hoy un negocio atractivo en sí mismo. Se han realizado inversiones superiores a los 100 millones de dólares en la década del ‘90 y sólo en el último año se complementaron con 30 millones más, sumándose a una proyección de inversión de capital superior a los 200 millones de la moneda estadounidense, en forma progresiva hasta el año 2008. La cadena de valor porcina es una variante mas que interesante para el desarrollo de la región y una de las alternativas para la reconversión de alguno de los monocultivos que se explotan desde hace varios años. nFuente: Análisis del Ingeniero Juan Luis Uccelli

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