MEXICO: DUPLICARÁ EL PAÍS IMPORTACIÓN DE CARNE POR HELADAS Y SEQUÍAS
Como otra de las repercusiones –de fatales consecuencias- que se derivan de las extremas heladas y sequías que afectan la producción del campo, México podría duplicar la importación de carne anual debido a la disminución del 30% de ésta; es decir, que además de las 400 mil toneladas de carne que se importan en promedio anualmente se podrían importar alrededor de 480 mil toneladas adicionales para abastecer el mercado y evitar que el precio de ésta se dispare y salga de la canasta básica.
El profesor-investigador del Departamento de Enseñanza, Investigación y Servicio en Zootecnia de la Universidad Autónoma Chapingo (UACh), doctor Gilberto Aranda Osorio, explicó que la producción de carne bovina anualmente en el país es de un millón 600 mil toneladas, la cual se verá afectada por la sequía tan severa que se ha presentado en varios estados productores de ganado del país.
Bajo esta condición, habrá falta de agua y de forraje para los animales. Esto generará un sobre pastoreo y posteriormente los animales tendrán balances energéticos negativos, como pérdida de peso, menor producción de leche y poca inmunidad, así como conflictos reproductivos e incidencia de enfermedades.
El especialista estableció que ante estas condiciones la reproducción del ganado tendrá un impacto negativo: “podrían algunos sobrevivir a las épocas difíciles pero no van a ser reproductivos, requerirán de tiempo para nutrirse y recuperar su estatus adecuado, lo que ocasionará una baja disponibilidad de ganado a corto y mediano plazo”.
El académico de la UACh aseguró también que las condiciones que se registran en la producción de ganado repercutirán en el incremento de importaciones para evitar que el precio de la carne no se vea afectado. “El costo se había mantenido pese a que los productores pagaban más por los granos como el maíz, sorgo, cebada y avena, entre otros, que son utilizados para la alimentación de los animales, pero ahora la situación se agrava por las afectaciones que sufrió el campo por las heladas y sequías del año pasado”.
Subrayó que ante tales cambios climáticos el territorio nacional ha sido susceptible en la pérdida de zonas ganaderas como Las Huastecas, integrada por los estados de San Luis Potosí, norte de Veracruz, sur de Tamaulipas e Hidalgo, “regiones netamente ganaderas que ahora son de uso agrícola.”
Consideró que el sector ganadero carece de una programación de actividades para enfrentar las épocas difíciles, por lo que se deben planear los tiempos de siembra y crecimiento del forraje, el cual estaría disponible durante la época de invierno para alimentar al ganado.
Aranda Osorio aseguró que los productores requieren actualizar sus sistemas de riego por aspersión o goteo para hacer eficiente el uso del agua y enfrentar este tipo de crisis en el campo como es la sequía, para asegurar la producción de alimentos.
Refirió que además deben considerarse forrajes alternativos como el nopal. Su cultivo como especie forrajera podría ser de gran ayuda para la alimentación de ganado en las épocas críticas, debido a que este producto requiere de una mínima cantidad de agua a diferencia de la alfalfa, por ejemplo. Ésta requiere de dos mil 500 litros de agua para producir un kilogramo, en tanto que el cactáceo solo necesita 150 litros para obtener una cantidad similar.