COLOMBIA ABRE NUEVOS NEGOCIOS DE CARNE CON RUSIA

Un parte satisfactorio dio el Ministro de Agricultura y Desarrollo Rural de Colombia, Andrés Fernández Acosta, al regreso de su reciente visita a Rusia, gracias a que logró concretar diversos negocios que mejoran el panorama exportador colombiano en rubros como carne de res y pollo, y lácteos, principalmente.

El funcionario tuvo la oportunidad de reunirse con su homóloga, la ministra Elena Scrinnik, y otras autoridades del Servicio Federal Sanitario, con quienes se logró el restablecimiento del acuerdo que permite las exportaciones de carne bovina y porcina a ese país, luego de que fueran restringidas debido a un foco de fiebre aftosa registrado en agosto de 2009 en Ipiales, Nariño.

Sin embargo, ése fue sólo uno de los resultados obtenidos por la misión de la que también hizo parte el Gerente general del Instituto Colombiano Agropecuario (ICA), Luis Fernando Caicedo Lince, ya que también se dio vía libre a la venta de carne de pollo, y de leche y sus derivados a ese importante mercado.

Es así como, de acuerdo con el balance presentado por los funcionarios a su regreso al país, se concretó la habilitación de plantas para la exportación de aves, y se avanzó en temas como el intercambio de azúcar (colombiana) por trigo (ruso) y la negociación de precios favorables para la importación de úrea a nuestro país.

Respecto al tema de la carne, el gobierno ruso levantó la restricción que había impuesto en agosto del año pasado, tras conocer el pronunciamiento de la Organización Mundial de Salud Animal (OIE), mediante el cual le fue restituido a Colombia el reconocimiento como país libre fiebre aftosa, y luego de una visita realizada hace cuatro meses por el Servicio de Sanidad Agropecuaria de Rusia a varias plantas de sacrificio y a inspeccionar la zona afectada por el foco.

Las importaciones de carne por parte de esa nación se estiman para 2010 en unas 800 mil toneladas, con tendencia a aumentar debido a la reducción de sus cabezas de ganado como consecuencia de una baja rentabilidad de la industria bovina.

“Ésta es una oportunidad importante para los ganaderos y las plantas de sacrificio que fueron certificadas por Rusia, pues cada vez más se abren nuevas posibilidades para estos productos colombianos en el exterior, gracias a la condición sanitaria del país y al cumplimiento de las normas de inocuidad exigidas por nuestros compradores”, dijo el Ministro de Agricultura.

En total son siete las plantas que hasta ahora han sido aprobadas para la exportación de este producto a Rusia. Se trata de las empresas Frigorífico Vijagual, Frigosinú, Frigorífico Camagüey, y cuatro plantas de Frigoríficos Ganaderos de Colombia (Friogan) que funcionan en los municipios de Valparaíso, Corozal, La Dorada y Villavicencio.

En cuanto a los negocios avícolas, las plantas autorizadas recientemente por el gobierno ruso para vender carne de pollo a ese mercado fueron Acondesa, Idecampo, Bucanero y Cooperativa de Producción y Trabajo Vencedor.

En lo que respecta al sector lácteo, las empresas que recibieron el aval para exportar sus productos a ese mercado fueron la Cooperativa de Productos Lácteos de Nariño, dos plantas de Alpina (Sopó y Facatativá, ubicadas en el Departamento de Cundinamarca), Alquería y tres plantas de Colanta (dos en Antioquia y una en Córdoba).

Más Logros

Durante la visita se planteó la posibilidad de reducir los trámites que existen actualmente para los exportadores colombianos de flores, ya que, según los empresarios del sector en ambos países, hay exceso de requerimientos tanto en las aduanas rusas como en materia de certificados solicitados, adicionales a los establecidos legalmente.

Al respecto, la ministra Scrinnik solicitó una explicación detallada del problema y una propuesta colombiana en tal sentido, incluyendo la lista de importadores rusos y una ejemplificación de los casos ocurridos.

Como se indicó inicialmente, también se avanzó en el tema de intercambiar azúcar por trigo. La propuesta colombiana apunta a liberar todos los aranceles aplicados por Rusia para un contingente de 200 mil toneladas de azúcar crudo o para uno de 150 mil toneladas de azúcar blanco, en tanto que el país haría lo propio para un pedido de 251.000 toneladas de trigo.

Sobre este punto, el Servicio Federal de Vigilancia Veterinaria y Fitosanitaria de Rusia (Rosselkhoznadzor) señaló que existe una oferta exportable de más de 7 millones de toneladas de trigo, de la cual ya se realizan despachos a países latinoamericanos como Chile, Perú y Brasil.

Por su parte, y de acuerdo con cifras de la Asociación de Cultivadores de Caña de Azúcar de Colombia (Asocaña), la producción de caña en Colombia llegó a 23,6 millones de toneladas en 2009, mientras que la de azúcar superó en igual periodo los 2,6 millones de toneladas métricas, de las cuales se exportaron 1,05 millones; durante el primer bimestre del presente año, los ingenios del país produjeron 393.323 toneladas métricas de azúcar, de las que se exportaron 120.438 toneladas métricas.

Por último, y ante la necesidad de úrea para satisfacer la demanda en Colombia, las autoridades rusas se comprometieron a suministrar una lista de exportadores fiables de dicho producto, lo mismo que a gestionar, de ser necesario, encuentros con los directivos de las fábricas proveedoras del mismo. La idea del gobierno es ofrecer úrea de muy buena calidad a los agricultores colombianos.

En términos generales, y tal como lo manifestó en el encuentro la Directora del Departamento de Países Americanos de Rusia, Elena Vladimirovna Danilova, aunque las relaciones comerciales bilaterales no alcanzan grandes proporciones, el año pasado registraron un incremento de 5,7%, pero durante los dos primeros meses de 2010 el flujo disminuyó 49%, cifra dentro de la cual se destaca la caída de 71% de las exportaciones rusas a Colombia, lo que se atribuye principalmente a la finalización de contratos de suministro de helicópteros, repuestos y maquinaria.

Con el fin de revitalizar el intercambio de productos, y como conclusión de este importante periplo, se tomó la decisión de fortalecer las relaciones interinstitucionales entre los Ministerios de Agricultura de ambas naciones, para lo cual, en lo sucesivo, se llevará a cabo una comunicación directa entre las partes.

A juicio del Gerente general del ICA, este positivo panorama con Rusia responde a la agresiva política que ha liderado el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural (MADR) con miras a abrir nuevas y reales oportunidades de mercado, cuyo objetivo es generar mayor estabilidad al intercambio comercial, en este caso en lo que respecta a los productos agropecuarios.