CARNE VACUNA BRASILERA CONTROLADA POR LA COMISION EUROPEA
Las organizaciones representativas de los agricultores europeos y de sus cooperativas agrarias, el COPA y la COGECA, apoyan la decisión tomada en el Comité permanente de la Cadena alimentaria y de Sanidad animal, encaminada a proteger la salud de los consumidores de la UE, siguiendo de cerca las importaciones a la UE de carne de vacuno de Brasil.
En repetidas ocasiones, las misiones de la Oficina Alimentaria y Veterinaria de la UE (OAV) han hallado graves disfuncionamientos en el país y particularmente han detectado su escasa capacidad a la hora de garantizar los mismos niveles de seguridad y trazabilidad de la carne que exporta que los que se aplican en la UE.
Pekka PESONEN, Secretario general del COPA-COGECA, ha declarado al respecto que “En vista de la incapacidad de Brasil de mejorar la seguridad de la carne que exporta a la UE, esta decisión tenía que haberse tomado hace tiempo.
Varias veces, la OAV ha detectado problemas en el país y los esfuerzos que se han hecho para resolverlos han sido constantemente insuficientes.
En 2006 se importaron unas 300.000 toneladas de carne de vacuno de Brasil a la UE y nadie sabía exactamente de dónde provenían, si eran portadoras de enfermedades animales o no, ni si habían sido producidas utilizando hormonas ilegales.”
En su misión a Brasil de marzo de 2007, la OAV pudo darse cuenta de que dicho país no había puesto en marcha un programa de vacunación eficaz contra la fiebre aftosa, ni tampoco disponía de un sistema satisfactorio de testado de la presencia del virus de esta misma enfermedad animal.
Tampoco dio garantías de la debida trazabilidad de los animales (identificación de los animales y control de los movimientos) y fue incapaz de garantizar que sólo la carne procedente de zonas exentas de fiebre aftosa podía llegar a la mesa de los consumidores de la UE.
Por lo que el Sr. Pesonen ha concluido que “Las restricciones impuestas deben mantenerse hasta que Brasil consiga mejorar sustancialmente sus normas. Si no se aprecia ninguna mejora en un próximo futuro o si surge algún problema con la carne de las empresas que pueden exportan a la UE, la Comisión europea no debe dudar en tomar ulteriores medidas”.