ARGENTINA: CARNES EN PUJA
Hace más de tres años que Argentina tiene cerrado su exportación de carnes al mundo. Esta política ha debilitado los mercados internos y externos que abastecieron por décadas a distintos destinos de consumo carnico.
Hoy el conflicto se agudiza pudiendo dejar sin empleo a más de 20mil empleados de frigoríficos. Estos faenadores tienen familia a la que sumamos, ya que dependen de estos puestos.
La familia tipo, de cuatro integrantes o más, dejaría a 80mil personas, sin dignidad alguna. Ellas lamentablemente se sumarian a los ya desempleados o subempleados que dependen de subsidios del estado argentino.
Todo por una gran codicia y avaricia de las políticas actuales que no dudan en cortarle la cabeza a los menos pudientes.
Para entender que sucede y la angustia que rodea a estos trabajadores, Silvio Etcheum, secretario del gremio de la Industria de la Carne, detallo "la política comercial del secretario de estado, Guillermo Moreno, quien el lunes fue abucheado por miles de faenadores que pidieron su renuncia.
Etcheum, pagó por las medidas de Moreno, con la intervención de su sindicato. El gremialista reveló que "sobre un total de 173 empresas y cerca de 31.000 empleados, están parados o suspendidos 3640 trabajadores. En 97 plantas hay reducción horaria, garantía horaria o adelanto de vacaciones, lo que alcanza a 13.189 empleados. En 32 empresas de servicios [faena o despostada para terceros] están con problemas de empleo 3864 trabajadores. En total, hay 21.193 empleos en riesgo".
El secretario de comercio Guillermo Moreno no es popular para el ciudadano común y no tiene ningún apoyo del sector agrario o de parte de los obreros y salvo la presidenta, la mayoría trata de evitarlo.
Su forma de persuadir "mostrando armas" en mesas de negociación cuando la "crisis del agro argentino" y sus ademanes mafiosos expuestos en fotos (caso Loustau ex ministro de economía de Argentina) fue muy recordado a la hora de protestar en las puertas de su secretaria.
Los faenadores de carne, furiosos por las medidas oficialistas que no cesan, fueron a gritarle que se vaya y se tuvo que refugiar dentro de sus oficinas.
Moreno quiere carne barata en góndolas y exportaciones nulas, pero esto es imposible en un país agro exportador por excelencia.
Mientras las vigilias de estos trabajadores, pasan entre angustias e impotencias, porque un par de burócratas ha decidido hacer cuentas en provecho de si mismos.
Fuente: Diario Buenos Aires