AMERICARNE 76: SENASA CUIDANDO EL BIENESTAR ANIMAL EN REMATES DE FERIAS

POR MONICA PONCE DEL VALLE*

En nuestro país, los actores que actúan en la intermediación están representados por ferias y consignatarios. La hacienda que se comercializa en estos remates tiene diversos destinos, con un porcentaje mínimo que va a faena, y el restante a otros establecimientos.

El ganado bovino puede comercializarse como: venta directa del productor; venta del productor con intervención de consignatario y venta en remates ferias y mercados concentradores. La actividad de la consignación es un servicio por el cual se coloca la comercialización en manos de los conocedores de las necesidades del mercado.

En principio, el SENASA vela por el procedimiento que se lleva a cabo en los remates ferias y concentraciones de animales en general, y lo plasma en un manual que es distribuido en las Oficinas Locales del Organismo para todos los veterinarios del país, y donde el bienestar animal no es desconocido.

El detalle es el siguiente:

· Se exige brindar un trato humanitario a los animales, aplicándose las pautas de bienestar animal en todas las actividades comprendidas, a saber: desplazamiento, estabulación, sujeción, carga, transporte, descarga y prácticas sanitarias, como así también en su alojamiento.

· Se exige a todo el personal interviniente que posea la práctica, preparación y destreza para emprender las actividades de manejo de los animales.

· Prohibición de golpear a los animales o generar estrés a los mismos bajo cualquier práctica.

· La política de bienestar animal debe ser aplicada también a los equinos que presten servicios, tanto en el trabajo como en las condiciones de alojamiento.

· Prohibición de presencia de perros en el ámbito de las instalaciones.

Resulta de importancia caracterizar el personal a cargo de las tareas, definiendo su perfil, ya sea de modalidad temporaria o fija. El conocimiento básico del comportamiento animal para un mejor manejo, resultará fundamental, facilitando la tarea. Un personal estable podrá alcanzar un nivel óptimo, sin que ello signifique que el temporario no pueda alcanzar una capacitación aceptable. La permeabilidad a las recomendaciones, en caso de presentarse algún aspecto a modificar, es una característica de la conducta del trabajador que debe ser considerada ventajosa.

Entre los aspectos a modificar podemos encontrar: agresión física a algún animal; acoso con perros; paleteado de a caballo; utilización de palos o picanas, estas últimas cuando su uso es innecesario, arreo bajo gritos o con prisa.

En relación a las instalaciones del remate-feria, la importancia radica en el control del diseño y mantenimiento en alambrados, postes, varillas, cargador, rampa, manga, verificando la ausencia de clavos, alambres, bordes salientes o tuercas. Un piso firme reduce las posibilidades de accidentes

La presencia de una fuente de agua disponible en el sector de corrales y la presencia de techo, plantas de reparo y sombra, o tinglado en la misma, son elementos que permiten reducir el estado de disconfort en los animales.

En relación al transporte, el camión deberá contar con la habilitación de SENASA correspondiente, conforme la Resolución 97 del año 1999, garantizando que el mismo tendrá piso antirresbaladizo, ventilación proporcionada por las paredes laterales con aberturas, techo con andarivel para mejor control de la carga, presencia de separadores para evitar en el viaje el desplazamiento brusco de los animales y rodillos externos e internos en las puertas traseras o laterales, que ayudan a preservar la integridad de los animales en las operaciones de carga y descarga.

Se recomienda verificar la ausencia de clavos, bordes salientes, piso enrejillado con faltantes, maderas rotas o puertas guillotinas que no ascienden lo suficiente para una correcta carga o descarga.

Asimismo, se debe controlar que la rampa de carga y descarga coincida con la rampa de ingreso-egreso de los camiones, condición que permite evitar en esa maniobra las lesiones en las extremidades de los animales.

Se debe evitar la utilización de inductores mecánicos o eléctricos de movimiento, salvo excepciones, determinadas cuando se ha probado con otros métodos y no se ha obtenido el resultado esperado, o en aquellos casos en que la integridad del operario está en riesgo. Sin embargo, el animal renuente al desplazamiento, deberá tener espacio por delante para moverse.

El SENASA fortalece la idea de promover la implementación de prácticas de manejo conformes con el bienestar animal, pero a bajo costo, dado que la capacitación del personal, mediante el conocimiento del comportamiento del animal, la ausencia del uso de picanas, de perros, golpes y gritos, el evitar la exposición a las inclemencias climáticas, el hacinamiento y las rutas en mal estado, a la hora del transporte, no significan una alta inversión.

*SENASA