2020: ENTRE INCERTIDUMBRES Y OPORTUNIDADES
Exportaciones, economías regionales, desarrollo de nuevos productos y valor agregado son algunos de los desafíos para la industria cárnica en este nuevo año que, si bien comienza con nuevas medidas económicas que ponen expectantes a productores y empresarios, plantea buenas perspectivas.
Por: Paola Papaleo
Que las exportaciones de carnes, tanto vacuna como porcina, han sido récord en el último año ya es un hecho. Entre noviembre de 2018 a octubre de 2019, los envíos vacunos se ubicaron en volúmenes cercanos a las 777 mil toneladas equivalente res con hueso, por un valor superior a 2.770 millones de dólares. Por otro lado, las ventas al exterior de carne bovina, resultaron significativamente superiores (+66,6%) a las de octubre del año 2018. En vistas a un nuevo año que, además, comienza con nuevo gobierno y medidas económicas, la pregunta es si se seguirá en el mismo camino o habrá un cambio de timón.
Los consultores económicos coinciden en que durante 2020 la economía seguirá en recesión con un consumo interno en lento crecimiento, por lo que apuntan a consolidar el mercado internacional. “Tenemos como país una gran oportunidad histórica de consolidar nuestra presencia en el mercado del Sudeste Asiático con carne vacuna ¿este gobierno va a frenar eso? Todo pareciera indicar que no, una retención del 9% no invalida ese crecimiento”, dice el Lic. Carlos Seggiaro de Seggiaro & Asociados durante su exposición Perspectivas Económicas y Mercados Agropecuarios al 2020 brindada para Fundación Fortalecer.
Si bien Seggiaro no observa un cambio de tendencias sobre los precios de los commodities, remarcó que hay accidentes climáticos o sanitarios que pueden afectar a algún producto en particular. Es el caso de la peste porcina que, a principios de 2019, dañó la producción de cerdos en China y otros países como Vietnam. “Quizás terminen sacrificando el 50 por ciento de su stock”, dice y agrega que “lo que estamos viendo, en cuanto al comportamiento del mercado mundial, es una aceleración en términos de precios porque tanto China como otros países del Sudeste Asiático están saliendo al mercado mundial a buscar proteínas, no solo de carne porcina”.
Durante todo el año pasado China fue uno de los principales receptores de la carne argentina. Dadas las condiciones actuales, el consultor afirma que para este año el país “tiene un partido para jugar en el mercado de carne vacuna, ya que se está produciendo una transferencia de consumo de carne de cerdo a otras carnes. Estamos en un 30% de exportación sobre la producción nacional y el 80% de las exportaciones de carne vacuna están destinadas al mercado chino” (ver gráficos 1 y 2). La oportunidad de consolidarse seguirá firme siempre que no se produzcan grandes cambios en el proceso de exportación.
Por su parte, en el Informe Sectorial de la Cadena Carne Vacuna realizado por el Dr. Fernando Gil y el Dr. Federico Santangelo de Agroideas, se estima que durante 2020 habrá una importante suba de precios para el primer trimestre del año, debido a:
- Fuerte incremento en las exportaciones que viene rompiendo récords mes a mes.
- La industria exportadora ha comenzado a abastecerse de mercadería que anteriormente era destinada al consumo interno.
- Con el cambio de autoridades y la emisión monetaria se producirá un leve aumento del consumo interno.
A su vez, destacan una menor oferta como consecuencia de “la caída de los niveles de encierre en los feedlot con hacienda destinada al consumo interno” que “provocará una menor oferta para abastecerlo, al igual a lo ocurrido en febrero 2019”. De esta manera, consideran también que para el primer trimestre se producirá una importante suba de la hacienda gorda. “Los precios del ganado de invernada y para faena ya comenzaron una suba en los valores recuperando poder de compra y superando en su mayoría los guarismos inflacionarios. Este proceso se da a pesar de una abundante oferta en el caso del gordo, con una tendencia a la baja en la oferta futura”, afirma el informe.
En cuanto al tributo del 9% de retención para la carne, confirmado por el nuevo gobierno, los consultores no lo ven como un obstáculo en sí mismo. “Anteriormente estaba tributando la suma fija de $3 por dólar, lo que significaba 4,8% – 5%, ahora tiene un incremento del orden del 4%. Consideramos que este nivel no afectará en forma significativa el rendimiento de la industria exportadora, por lo cual no debiera repercutir en los precios al productor en forma significativa”, dicen Gil y Santángelo.
Todo cambio, al igual que las crisis, genera incertidumbres pero al mismo tiempo ofrece oportunidades. Y, si bien se prevé que la actividad económica argentina en general en 2020 seguirá enferma, la industria cárnica podrá seguir siendo una de las más beneficiada si sabe aprovechar los vientos a favor, sin olvidar el equilibrio entre el mercado externo y el interno.
Tecnología para innovar
La investigación y desarrollo son dos áreas fundamentales para sumar valor a la industria cárnica y promover su competitividad a nivel global. En Argentina, tanto el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) como el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) son dos organismos claves que trabajan en conjunto con el sector privado para promover, año a año, la innovación.
Desde elINTI, la Lic. Mariana Sánchez -Jefe del Departamento de Desarrollo de Nuevos Productos- cuenta que durante el año 2020 las líneas de trabajo en el área de cárnicos serán principalmente dos: desarrollo de análogos cárnicos basados en proteínas vegetales obtenidas de legumbres, como respuesta a la demanda de un consumidor que busca una dieta equilibrada entre proteínas animales y vegetales; y snack cárnicos, ricos en proteínas que constituyen una alternativa poco desarrollada en el mercado local como indulgencia on the go.
En el caso del INTA estarán participando de la Red Iberoamericana de Carnes Saludables (Proyecto internacional CYTED-119RT0568), así como avanzando en líneas de I+D+In para carnes de diferentes especies. ElIng. Sergio R. Vaudagna, Director del Instituto de Tecnología de Alimentos (ITA) del Centro de Investigación de Agroindustria (CIA) en INTA Castelar, adelanta Inocuidad de carnes y de productos cárnicos de diferentes especies y Calidad de carnes y de productos cárnicos serán dos de los ejes a profundizar. Así como el trabajo en Desarrollo de productos (estrategias para el desarrollo de productos cárnicos con bajo contenido de sodio y mayor vida útil; desarrollo de productos cárnicos con incorporación de aditivos de origen natural; calidad nutricional y sensorial de hamburguesas de carne de búfalo); Bienestar animal y calidad de carne (estudio de perfil metabólico asociado al bienestar y a la alimentación en bovinos de carne; diagnóstico y plan de mejora de bienestar animal en plantas de faena como proceso de adaptación a la normativa vigente y agregado de valor; bienestar animal y percepción de los consumidores de carne); Aprovechamiento de subproductos (desarrollo de tecnologías para el aprovechamiento integral de subproductos de origen animal; valorización de subproductos de la industria cárnica mediante la obtención de hidrolizados proteicos con propiedades antioxidantes y/o antimicrobianas; optimización del proceso para extracción y purificación de péptidos y lípidos de desechos acuícolas); Extensión de vida útil (utilización de materiales biodegradables/biobasados en envases de carne bovina refrigerada; vida útil de carne porcina: efecto de las condiciones ambientales durante la producción en la región norte de Argentina).
Con foco en las economías regionales
Durante el año 2019 desde la Sub Secretaría de Alimentos y Bebidas que pertenece al Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, la mirada y el trabajo estuvo puesto en incentivar a las Pymes y economías regionales, así como en promover las exportaciones. “El mundo de los alimentos es el sector que más valor agregado y empleo genera. Se abrieron 250 mercados, entre ellos Brasil, China, India, Vietnam, Estados Unidos, España. Lentamente empezamos a tener una oferta más diversificada” expresa la Directora de la Sub Secretaría, Mercedes Nimo. Las exportaciones crecieron entre un 2 y un 3% (25 mil millones de dólares) y, en cuatro años, alrededor de 300 pequeñas y medianas empresas comenzaron a enviar sus productos al exterior. Junto con el aceite de oliva, los arándanos, granada, frutos secos y limones, las carnes han tenido un “crecimiento exponencial”, dice la funcionaria y agrega que “las exportaciones superaron los 2 mil millones de dólares. Todavía hay mercados por crecer. Si bien China hoy se está llevando gran parte de la demanda, no hay que descuidar al resto de los mercados. También hay que cuidar al mercado interno, porque más allá de que ha bajado algo el consumo, seguimos siendo un país donde la carne forma parte de nuestra vida cotidiana. Es necesario tener siempre un equilibrio entre el mercado interno y el externo”.
Entre los logros alcanzados durante su gestión, Nimo destaca:
- Herramientas para agregado de valor: empezar a posicionar el sello Alimentos Argentinos, que la Pyme esté en su territorio, que pueda encontrar los servicios en ese lugar, desarrollarse allí y poder exportar desde su lugar de origen.
- Capacitación: se intensificó el trabajo con las Pymes a través del Programa Escuela de Negocios para darles herramientas de gestión.
- Mesas de competitividad: espacio de dialogo y construcción colectiva con muchas de las economías regionales.
- Tecnificación: generó muchos procesos de eficiencia desde lo productivo y tecnológico.
- Simplificación de trámites: permitió que muchas Pymes comenzaran o volvieran a exportar.
Si bien, al cierre de esta edición, la funcionaria continuaba a la cabeza de la Sub Secretaría de Alimentos y Bebidas, indicó que aún no había tenido indicaciones si se mantendría o no en su cargo durante el nuevo gobierno. Asimismo, manifestó su deseo de seguir trabajando y detalló que para los próximos años “las economías regionales son un tema pendiente que hay que trabajar más profundamente”. Es así que destacó la importancia de las distintas herramientas de diferenciación, las denominaciones de origen e identificaciones geográficas. “Veo un potencial enorme sobre todo en el marco de los acuerdos internacionales que firmamos durante 2019 porque se le brinda una protección legal a estos productos, es una manera de agregar valor en origen muy fuerte”, concluyó.
Fuente: Revista AmeriCarne Nº 134