VENTAJAS Y PRECAUCIONES EN EL USO DEL AMONIACO EN LA REFRIGERACIÓN INDUSTRIAL
Pero cumplir con las normas de seguridad adecuadas es clave para su correcto uso. Sobre este tema versó una capacitación organizada por el INTI y convocada por Red Alimentaria.
La revalorización del uso del amoníaco como refrigerante industrial convocó a profesionales y técnicos en el curso organizado por el INTI en su Parque Tecnológico Miguelete, San Martín, Buenos Aires, y convocado por Red Alimentaria.
Organizado por el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), convocado por Red Alimentaria y promovido por CLS Industrial, se realizó, a comienzos de diciembre de 2017, en el Parque Tecnológico Miguelete del INTI, en San Martín, Buenos Aires, un Curso de Refrigeración Industrial con Amoníaco para Empresas de Alimentos.
Erica Stacey y Marcos Villa (INTI)
Ariel Vázquez y Ezequiel Cóncaro (CLS Industrial).
La capacitación estuvo dirigida a profesionales, ingenieros a cargo de plantas de refrigeración, personal de mantenimiento, supervisores, operadores e interesados en adquirir conocimientos básicos en esta temática.
Equipo de Red Alimentaria
Devora Dorensztein (Red Alimentaria) junto a Ariel Dias Vieira y Alejandro Figueras (INTI)
Disertaron los Ings. Germán Parola, Gerente de Proyectos de Frío-Raf y Profesor de la Cátedra Instalaciones Térmicas, Mecánicas y Frigoríficas de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) Regional Rafaela, Santa Fe, y Marcelo Barbani, titular de Frío Ingeniería y miembro del Movimiento de Empresarios Nacionales para el Desarrollo Argentino. El curso contó con el auspicio de estas empresas, junto a Frigostrella do Brasil y FIASA.
Juan Galliano (Frío-Raf)
Patricia y Wellington Santos (Frigostrella do Brasil).
Hernán Cabral (Frío Industrias Argentinas S.A. -FIASA-)
El Ing. Germán Parola abordó los temas Amoníaco como refrigerante y Eficiencia Energética por el Buen Uso de Condensadores. Señaló que “en nuestro país, la refrigeración industrial es estratégica para el desarrollo” y que “no fue casualidad, que Argentina fue de los primeros países en el mundo en desarrollar frigoríficos para la exportación de carne” y que “estamos frente a una nueva posibilidad de crecer en la exportación de alimentos procesados y congelados”.
Germán Parola: “La ingeniería en refrigeración se enfrenta al nuevo desafío de ser sustentable y debe poner el enfoque en aspectos que prioricen la eficiencia, el uso de refrigerantes naturales y la seguridad”.
Frente a esta nueva oportunidad, destacó que “el perfil agroindustrial de nuestro país, la permanente actualización de nuestros ingenieros y técnicos, y la inversión de algunos empresarios permitió mantener el sostenido desarrollo de la industria de la refrigeración argentina” y que “nuestras empresas pueden competir tecnológicamente con sus pares de países más desarrollados”.
Sobre la eficiencia energética y los refrigerantes naturales puntualizó que “la ingeniería en refrigeración se enfrenta al nuevo desafío de ser sustentable y debe poner el enfoque en aspectos que prioricen la eficiencia, el uso de refrigerantes naturales y la seguridad”.
Este enfoque sustentable está alineado con el nuevo acuerdo logrado en París, en la cumbre de Cambio Climático (COP21), en 2015, donde 195 países acordaron objetivos estratégicos para reducir el calentamiento global.
Sobre la incidencia que la refrigeración tiene en cuanto a su impacto ambiental en el planeta, Parola recordó que desde 1875 se utiliza el amoníaco (NH3) como refrigerante, compuesto que dominó la industria hasta comienzos del siglo XX, y que hacia 1930 fue reemplazado por los refrigerantes sintéticos halogenados (conocidos como freones), al dudarse de la seguridad del NH3.
Los freones se desarrollaron como una gran solución para la refrigeración doméstica y comercial, pero tras más de 4 décadas de expansión y uso se descubrió el enorme daño medioambiental que causaron, destruyendo la capa de ozono y aportando gases de efecto invernadero que impactan en el calentamiento global.
“Por eso se está volviendo al NH3 que no tiene ningún impacto negativo hacia el ambiente”, señaló Parola al tiempo que -respecto de la seguridad de su uso- “existen normas y códigos internacionales, más la legislación nacional, que debemos seguir para un manejo seguro”, que garantizan que no se produzcan explosiones.
Parola también citó otra ventaja no menor del uso del NH3, indirectamente también vinculada con la sustentabilidad económica y ambiental de la refrigeración: la eficiencia energética. “El consumo eléctrico de sistemas frigoríficos de NH3 condensado por agua, es prácticamente la mitad que un sistema que utilice refrigerantes sintéticos, que normalmente condensan por aire”. Si bien reconoció que “la inversión es mayor para un sistema de NH3”, explicó que “los períodos de amortización normalmente no superan los 2 años”.
Y al respecto fue enfático: “ahorrar energía eléctrica es determinante en la rentabilidad y competitividad de toda empresa moderna, pero no es solo una necesidad económica, sino también una obligación moral de todos los habitantes del planeta, para poder desacelerar el proceso de cambio climático y garantizar la vida de futuras generaciones”.
Finalmente, en cuanto al presente y futuro de la refrigeración industrial, Parola opinó que “deberá alinearse con los objetivos de sostenibilidad” y que hay 2 tendencias bien marcadas: “usar refrigerantes eficientes y naturales que no alteren el medioambiente, como el amoníaco R 717 y el dióxido de carbono R 744, que son los más aptos” y “hacer sistemas frigoríficos más eficientes o reconvertir los existentes para disminuir el consumo de energía eléctrica”.
Juan Galliano (Frío-Raf), Walter Antonio Burgel (Proyectos y Servicios Industriales), y José Masello (Tromba).
SEGURIDAD PERSONAL
Por su parte, el Ing. Marcelo Barbani se refirió a Seguridad en Plantas Frigoríficas Industriales y Aumento de la Eficiencia en Sistemas de Congelados.
Respecto de la eficiencia del NH3 como refrigerante y sus cuestionamientos respecto de la seguridad de su uso y como ella debe garantizarse, explicó que la descarga directa de NH3 a la atmósfera es aparentemente un gran problema, pero muchos profesionales de la refrigeración, en ocasiones, descargan amoníaco al aire, cuidando que las concentraciones sean bajas. “Estas descargas no contribuyen a la degradación de la capa de ozono ni al efecto invernadero. Además el NH3 es un compuesto de formación natural en el aire y es vital para muchos procesos biológicos”, señaló.
Marcelo Barbani: “Todo el personal involucrado en la operación de la planta debe entender la totalidad de la instalación y cómo trabaja el sistema. Así, cuando aparece un problema, podrá decidir las mejores acciones a seguir”.
Más allá de las ventajas técnicas y económicas del NH3, Barbani enfatizó en los aspectos de seguridad: “Proveer la capacidad de refrigeración necesaria con bajo costo de energía puede ser el objeto de diseño, pero la eficiencia energética solo será un factor importante después que la seguridad del sistema haya sido garantizada”, sostuvo.
Explicó que una planta segura debe proteger a las personas, incluyendo empleados y público adyacente, y evitar los accidentes que provocan pérdidas de productos almacenados y daños materiales, cuya reparación requiere un alto costo.
Más allá de las medidas tomadas al respecto en el diseño y construcción de plantas de refrigeración, Barbani puntualizó los ítems a tener en cuenta para su operación segura. Sostuvo que “todo el personal involucrado en la operación de la planta debe entender concienzudamente la totalidad de la instalación y estar familiarizado sobre cómo trabaja el sistema. Así, cuando aparece un problema, podrá analizar la situación y decidir las mejores acciones a seguir”.
Es recomendable que toda sala de máquinas tenga un sistema de ventilación forzada que renueve completamente el aire 6 veces por hora. También señaló Barbani que pueden colocarse detectores de amoníaco que manejen un sistema de ventilación de emergencia y mantengan en la sala una concentración máxima de 100 a 150 ppm de refrigerante.
RECOMENDACIONES BASICAS
Barbani dijo que “cualquier trabajador de plantas de refrigeración debería estar familiarizado con la rutina de primeros auxilios ante accidentes por exposición al NH3”. Al respecto, consignó una lista básica de recomendaciones sobre seguridad personal a tener en cuenta:
- De ser posible, evitar inhalación, contacto con la piel y con los ojos.
- Enjuagar las áreas afectadas con abundante agua.
- Quitar las ropas, excepto si se han congelado y pegado a la piel, por contacto con NH3 líquido.
- Nunca usar lentes de contacto mientras se trabaje con NH3.
- Usar protección facial y respiratoria adecuada al hacer reparaciones.
- Proteger las manos con guantes de goma.
- Utilizar ropa con nivel de protección adecuada al nivel de derrame.
- Disponer máscaras de filtro y autónomas (con su propio contenedor de oxígeno), cerca de los accesos a las salas de máquinas.
- Ante un derrame de NH3, asegurar siempre una adecuada ventilación de la sala antes de entrar, aún si el operario está protegido con máscara.
Más información:
www.frioraf.com.ar
www.frioingeniería.com.ar
www.inti.gob.ar
www.redalimentaria.com
Fuente: Revista AmeriCarne, Edición Nº122, Enero 2018