URUGUAY: VISLUMBRAN UN BUEN FUTURO PARA LA CARNE PESE A "LUCES AMARILLAS"
La cadena cárnica tiene buenas perspectivas coincidieron integrantes de la misma, pero hay algunas "luces amarillas" que atender y no se deberán cometer errores para aprovechar esa situación y discreparon sobre la exportación de ganado en pie.
Esa fue una de las conclusiones de la primer mesa redonda del 8° Ciclo de Conferencias 2011 Políticas de Estado, el Agro en los tiempos que vienen, organizado por la Consultora Seragro, el Instituto Interamericano de Cooperación Agropecuaria (IICA) y El País. En esta ocasión el ciclo se denomina "Debate a fondo" sobre tres temas: Ganadería, Agricultura y Tierra.
Técnicos, productores e industriales coincidieron en que el sector está en una fase de "estabilización" pero no "estancamiento" y que las perspectivas a futuro son buenas debido a que habrá una mayor demanda por alimentos a nivel global.
De todas maneras, varios alertaron por algunas "luces amarillas" que podrían condicionar ese futuro y otros, como el presidente de la Asociación Rural, José Bonica, llamaron a aprovechar "el buen momento" y "no cometer errores".
Bonica dio como un hecho que en un par de meses Uruguay accederá a parte de un cupo de la Unión Europea de 20.000 toneladas para cortes procedentes de ganado engordado a corral sin pagar arancel. Esto es una "excelente oportunidad", expresó.
Para el director de Información y Análisis Económica del Instituto Nacional de Carnes (INAC), Pablo Caputi, la economía uruguaya crecerá entre 7% y 8% este año y al menos un 5% el año que viene. Eso determinará que el país haya crecido entre 2003 y 2013 "un 100%", con lo que "transforma un país de renta baja en uno de renta media", indicó. A su juicio, es "un país en transición y una ganadería en competencia".
El vicepresidente de Cooperativas Agrarias Federadas (CAF), Roberto Benia, dijo que hoy el sector no tiene un estancamiento estructural sino un "reacomodamiento de cosas", mientras que el director general de la División Uruguay de Marfrig Group, Martín Secco señaló que "en un mundo como el de hoy tener cierta estabilidad no es algo malo".
En tanto, el integrante de la Junta Directiva del Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) y columnista de El País Agropecuario y radio El Espectador, Rodolfo Irigoyen, afirmó que "hay luces amarillas" para el sector y mencionó como "un riesgo" que "todo el crecimiento" exportador del mismo "esté dependiendo de los precios".
Una de esas luces amarillas son los costos que tiene la cadena. "La relación insumo-producto se va deteriorando" dijo Bonica y agregó que "la respuesta (para paliarlo) viene por el lado de la productividad".
Para Irigoyen "este costo país a largo plazo es insostenible" ya que Uruguay está "perdiendo competitividad" con sus principales compradores "salvo Brasil". "Algo hay que hacer" espetó.
"Nos preocupa muchísimo el tema", enfatizó Secco y fustigó que "además el país no toma medidas de prevención para cuando estos ciclos puedan cambiar".
Respecto a si se ven riesgos de incumplimiento comercial a futuro, Secco afirmó que "es fácilmente comprobable que hoy la ecuación de la industria no cierra, porque el precio de venta es casi igual al precio de compra". En ese sentido, expresó su preocupación por si esta situación se prolonga y solo quedan "los que resisten", algo que "puede hacer concentrar más la industria (frigorífica), lo que no es bueno".
Benia señaló que le "aflige" ver que "la industria opere al 50% de su capacidad".
Mientras, Caputi afirmó que a diferencia del pasado, hoy hay "una industria saneada" y "productores saneados", lo que "hace que la pulseada sea entre dos agentes más fuertes".
Para Irigoyen "está superada" la época en que algunos frigoríficos ofrecían pagar algún centavo más por la carne sin tener la capacidad financiera para hacerlo y ello derivaba en incumplimientos de los pagos a los productores.
"Nunca se puede decir `nunca jamás` (va a pasar eso) pero es un tema que no debe preocupar", remató.
Los panelistas coincidieron en que el avance de la agricultura no representa una amenaza para la ganadería, sino que se debe ver la complementación entre ambas actividades. Mencionaron como ejemplo el engorde a corral del ganado, que se hace con granos como el sorgo en vez de con pasturas. En el engorde a corral, todos ven una oportunidad para la ganadería.
Benia dijo que la "interacción" entre ambos rubros "viene siendo mayor" y "va a ser mayor", a lo que agregó que "la expansión agrícola no tendría que afectar la producción total (de carne)". Según Bonica hay "sinergías" entre agricultura y ganadería. "Que haya más agricultura es sinónimo de mayor oferta de suplementos para ganado" afirmó y complementó con que "un mejor precio del ganado viabiliza algunos cultivos que son necesarios para la rotación".
Las razas son las adecuadas a futuro
Ante la pregunta de si la ganadería tiene la combinación de razas adecuadas a futuro, todos los panelistas coincidieron.
"Por supuesto que sí" apuntaron Martín Secco y José Bonica. Para Rodolfo Irigoyen "estamos muy bien desde el punto de vista racial". Secco complementó con que "hay gente que le gusta desarrollar una raza y ser fiel a ese sentimiento que tiene" más allá que no sea la mejor en cuanto a rendimiento cárnico. Para Roberto Benia, "tenemos una base genética de primer nivel en el país".