SOLO AVES & PORCINOS EDICION 30: CAPACITACION Y EVALUACION DE LOS ACTORES DE LA CADENA PORCINA/ SIM
Por: Mariela Monterrubianesi*
Una vez elaborados el marco legal y los procedimientos adecuados, resulta imprescindible garantizar la capacitación permanente de todo el sector involucrado, tanto de los profesionales y técnicos oficiales, como del sector productivo en general.
Una de las formas de sensibilizar y evaluar a los actores de una cadena productiva, involucrados en la detección y en la atención de una emergencia, es mediante la realización de ejercicios de simulacro. Estos constituyen una importante herramienta para desarrollar de manera ficticia la ocurrencia de un evento sanitario y evaluar las acciones y decisiones que toman los equipos de emergencia convocados.
Este ejercicio de capacitación consiste en simular la aparición de un foco de enfermedad en animales. En el caso específico de los cerdos, la importancia se centra en la necesidad de reforzar la vigilancia epidemiológica de la peste porcina clásica y otras enfermedades exóticas de los porcinos. Además de los controles serológicos y actividades de vigilancia que realiza el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) para el monitoreo de estas patologías, resulta indispensable contar con todo el sector productivo comprometido en la tarea. Este compromiso significa, entre otras cosas, la detección precoz y la notificación inmediata a la autoridad sanitaria de cualquier evento en el cuál se sospeche la presencia de una enfermedad en los animales que pueda significar un riesgo para el país.
Los simulacros llevados a cabo por el Senasa en el Programa de Porcinos se realizan en tiempo real y en terreno, aunque existen otras modalidades también válidas como realizar ejercicios de gabinete. Todos ellos pretenden aplicar y evaluar el Sistema Nacional de Emergencias Sanitarias (Sinaesa), que define a los equipos de emergencia y sus roles. Este sistema se activa ante la detección de enfermedades persistentes, exóticas o situaciones epidemiológicas que impliquen riesgo sanitario, tanto dentro del territorio nacional como en los países limítrofes.
La actividad tiene una duración de entre cuatro y cinco días. El primer día, los participantes son informados sobre la notificación de una sospecha o una enfermedad confirmada. Se les brinda toda la información disponible del caso, que se denomina foco índice. A partir de allí, se dividen los grupos de trabajo y se organizan para la investigación epidemiológica, la contención y la resolución de la emergencia cumpliendo cada uno su rol asignado.
Es recomendable que en este tipo de actividades, además del personal del Senasa, participen activamente veterinarios del sector privado y otras instituciones, así como autoridades locales, quienes juegan un rol específico durante la emergencia. En varias oportunidades también se invita a participar a representantes de los servicios veterinarios de los países de la región. En este sentido, resulta muy interesante compartir experiencias y discutir sobre las estrategias nacionales que aspiran a mejorar la vigilancia a nivel regional.
Un simulacro permite entrenar a los profesionales de este servicio sanitario en la atención, resolución y protocolización de un foco de enfermedad en porcinos. A su vez, durante el ejercicio es posible constatar la capacidad de conducción y el espíritu de mando de quienes dirigen los operativos, los sistemas de circulación de la información, el desenvolvimiento en terreno y la capacidad de diagnóstico rápido. Además, las conclusiones y recomendaciones que de ellos surgen son muy importantes para actualizar la normativa en la materia y para la readecuación de dichos equipos.
Durante estos ejercicios se utiliza una herramienta tecnológica desarrollada por la Coordinación General de Campo de la Dirección Nacional de Sanidad Animal del Senasa denominada “Visualizador de Información Geo-referenciada” (VIG). Se trata de un sistema informático para el análisis de datos, que permite observar de manera gráfica todo tipo de información geo-referenciada, en tiempo real y sin la necesidad de instalar un software específico. Este sistema resulta de gran utilidad en situaciones de emergencia, puesto que posibilita la obtención de forma fácil y rápida de toda la información existente en el Sistema de Gestión Sanitaria (SGS) y en el Sistema Integrado de Gestión de Sanidad Animal (SIGSA), y su representación mediante mapas completos con rutas, geografía, existencias ganaderas y circuitos de movimientos de animales, herramientas que facilitan la gestión y toma de decisiones.
Por último, es importante destacar que este tipo de actividades participativas, que movilizan y alertan a toda la comunidad, sirven para sensibilizar a todos los actores de la cadena sobre la importancia que implica la pronta notificación de un evento de sospecha o enfermedad a la autoridad sanitaria.
*Coordinadora del Programa de Porcinos del Senasa
Email: porcinos@senasa.gov.ar