RUSIA PRORROGO LA HABILITACION DE FRIGORIFICOS URUGUAYOS

RUSIA PRORROGO LA HABILITACION DE FRIGORIFICOS URUGUAYOS

 

Una nueva misión de auditoría volverá al Uruguay para revisar los frigoríficos y comprobar si se están cumpliendo con las nuevas normativas establecidas por las autoridades sanitarias rusas.

La cadena cárnica tomó la noticia con optimismo, porque sabe que la prórroga demuestra que Rusia cree en Uruguay, que está cumpliendo con las nuevas normativas y tiene garantías suficientes para los importadores.

Uruguay cuenta con varios frigoríficos habilitados para colocar cortes bovinos con destino a industria dentro de Rusia, pero también hay empresas que pueden llegar con menudencias y cortes especiales a las cadenas de supermercados.

En 2007 Estados Unidos compraba el 47% de la carne que producía Uruguay y Rusia apenas importaba el 9% del total. Sin embargo, en los primeros meses de 2008, los importadores rusos pasaron a ser los segundos compradores más importantes.

"La demanda de Rusia y los precios están firmes y en los mismos niveles que desde hace tres semanas", aseguró Patrick Long, broker y titular de All Meat Trading. Pero la carne uruguaya no está sola en este destino y su principal competidora es la brasileña. "La demanda rusa es complementaria a la que reciben Brasil y Argentina. Estos dos países han venido dando algunos tumbos en este mercado en los últimos meses, no logrando abastecer a Rusia con los volúmenes que precisa", explicó el operador.

Las autoridades sanitarias rusas habilitaron en Brasil 40 empresas para exportar carne y se amplió la habilitación a 16 estados más. "Eso puede reforzar los volúmenes de carne brasileña en ese mercado", admitió Long. "En la medida que no aparezca Brasil con un volumen grande de oferta, los rusos van a seguir comprando carne uruguaya. Estamos bien vistos en el mercado en cuanto a calidad y cumplimiento. Nada hace prever que haya una caída del interés de los rusos en seguir comprando acá", aclaró el titular de All Meat Trading.

La carne uruguaya es parecida a la argentina y los frigoríficos argentinos no están pudiendo exportar por las presiones políticas del gobierno de Cristina Kirchner.

La oportunidad de vender más carne a Rusia y a la Unión Europea está al alcance de la mano para las empresas uruguayas, pero el problema que se plantea es que sigue siendo escasa la oferta de ganado preparado para faena, pese a que los precios no han parado de subir y están en los máximos históricos.

Se están haciendo negocios a U$S 2,40 y U$S 2,45 por kilo de carne en segunda balanza y las últimas lluvias podrían motivar a los ganaderos a retener sus animales y no enviarlos a los frigoríficos para ser faenados, a la espera de precios todavía más altos que los actuales.

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