REVISTA SOLO AVES& PORCINOS 53/ CEVA SALUD ANIMAL: ANEMIA INFECCIOSA AVIAR: CARACTERISTICAS Y CONTRO
Por MV Lucas Sara*
Se trata de una enfermedad reconocida en todo el mundo con gran diseminación en zonas de alta densidad de producción avícola con implicancias clínicas (mortandad en aves jóvenes), económicas (alteración del desempeño productivo) e inmunológicas (inducción de inmunosupresión). La enfermedad se presenta principalmente en aves de entre dos a cinco semanas de edad con gran impacto en el desempeño productivo, especialmente en pollos de engorde. Aves mayores son susceptibles a la infección pero no manifiestan el cuadro clínico característico debido al desarrollo de resistencia a la enfermedad. Sólo las aves infectadas durante los primeros días de vida desarrollan la enfermedad clínica, mientras que después de dos o tres semanas de edad no se observarán síntomas o lesiones específicos. Por este motivo, la transmisión vertical se considera la principal forma de inducción de la enfermedad clínica en el campo. Sin embargo, la alta resistencia en el medioambiente permite que el virus persista en el entorno y, por lo tanto, pollitos de un día sin niveles adecuados de anticuerpos maternos contra CAV pueden ser infectados horizontalmente dentro de los primeros días de vida y desarrollar síntomas de la enfermedad.
Los signos clínicos se presentan entre los 12 y 21 días. Lo más indicativo es la anemia, evidenciada por diversos grados, palidez de los músculos, las crestas y barbillas. Puede observarse sangrado muscular y dermatitis secundaria. Además, se presentan depresión, retraso en el crecimiento y baja uniformidad del lote.
La presentación subclínica de la enfermedad se caracteriza por la incapacidad de las aves para montar una respuesta inmunológicamente adecuada a los programas de vacunación y los desafíos infecciosos en ausencia de síntomas y lesiones específicos en las aves infectadas luego de las tres semanas de edad como consecuencia de la transmisión horizontal. La inmunosupresión observada se debe a los efectos adversos del virus sobre la fagocitosis y la presentación de antígenos y sus consecuencias sobre la eliminación de los microorganismos. Se ha demostrado además, que la infección subclínica por CAV interfiere con la producción de citoquinas esenciales para el desarrollo y la regulación de la respuesta inmune y la maduración de linfocitos. Por lo tanto, infecciones subclínicas también dan lugar a la alteración en la función de las células inmunes. Un análisis económico de lotes con infección subclínica mostró un beneficio neto 13% menor en los pollos de engorde que lotes control no infectados, diagnosticado por la presencia de anticuerpos contra CAV a edad de faena en comparación con lotes serológicamente negativos. Los anticuerpos pasivos transferidos a la progenie permanecen en promedio por hasta tres semanas. La disminución de los anticuerpos maternos inicia un período en el que las aves pueden comenzar a infectarse horizontalmente desarrollando una infección subclínica e inmunidad activa posterior contra el virus. Por lo tanto, la presencia de anticuerpos contra CAV en pollos de engorde a edad de faena, incluso aunque nunca hayan desarrollado la enfermedad, permite el diagnóstico de la infección subclínica en el lote.
La estrategia para disminuir los efectos de la infección clínica o subclínica provocados por CAV debe incluir la limpieza y desinfección combinadas con adecuado descanso sanitario y vacunación de las reproductoras. Desde el punto de vista de la protección a la progenie, debe tenerse seguridad de que los lotes de reproductoras sean seropositivos antes del inicio de postura para evitar la transmisión vertical y garantizar la protección durante las primeras dos a tres semanas de vida de los pollitos. La seroconversión puede ser conseguida por la infección natural o vacunación con vacunas vivas atenuadas.
Para la inmunización de las reproductoras existen vacunas atenuadas y a continuación se presentan una serie de estudios e investigaciones realizados para evaluar la eficacia de la cepa Del-Ros en la prevención de la Anemia Infecciosa Aviar.
Estudio 1
En el primer estudio, un lote de gallinas reproductoras fue vacunado con la cepa Del-Ros mediante punción en el pliegue del ala a las nueve semanas de vida. El lote vacunado fue monitoreado serológicamente durante todo el ciclo productivo mediante la prueba de virus-neutralización (VN).
El 100% de las aves resultaron positivas a la prueba de VN para CAV luego de la vacunación y durante todo el ciclo productivo.
Se detectaron títulos elevados y uniformes de anticuerpos frente a CAV a lo largo de todo el ciclo de vida de las aves.
La cepa Del-Ros de CAV aplicada mediante punción en el pliegue del ala proporciona una seroconversión uniforme del lote de gallinas reproductoras durante todo el ciclo productivo.
Ensayo 2
En el siguiente ensayo, se desafió con una cepa de CAV a pollos de engorde de un día de edad provenientes de lotes de gallinas reproductoras de distintas edades (vacunadas con la cepa Del-Ros y no vacunadas frente a CAV) para evaluar el nivel de protección clínica transferido a la progenie.
Luego del desafío, las aves fueron evaluadas diariamente durante 21 días para detectar la presencia de signos clínicos y lesiones de CAV. Además se tomaron muestras de sangre para determinación de hematocrito.
En todos los casos se observó un alto grado de protección luego del desafío con una cepa de campo de CAV de alta virulencia en pollos de un día de vida provenientes de lotes de gallinas vacunadas con la cepa Del-Ros.
En contrapartida, los pollos provenientes de lotes de gallinas que no recibieron vacuna de CAV, evidenciaron signos clínicos de la enfermedad luego del desafío.
La protección clínica inducida pudo observarse en la progenie de las gallinas reproductoras vacunadas con la cepa Del-Ros a diferentes edades durante todo el ciclo productivo.
Estudio 3
El siguiente estudio, se realizó para evaluar la respuesta serológica luego de la vacunación de gallinas reproductoras con la cepa Del-Ros en comparación con otras dos cepas vacunales de CAV. Aves de nueve semanas de edad fueron vacunadas por distintas vías de acuerdo a la recomendación del proveedor y monitoreadas mediante ELISA competitivo de CAV a las 2, 4 y 6 semanas post-vacunación para determinar el porcentaje de aves positivas a CAV. Al mismo tiempo, se mantuvieron un grupo de gallinas sin vacunación como grupo control no vacunado.
La cepa Del-Ros evidenció una rápida conversión en comparación con las cepas vacunales de CAV evaluadas.
Luego de cuatro semanas post-vacunación, el 100% del lote vacunado con la cepa Del-Ros mediante punción en el pliegue del ala se encontraban seropositivas a CAV. Esta rápida y uniforme seroconversión asegura la transferencia de anticuerpos frente a CAV a la progenie del lote.
Las investigaciones y ensayos realizados permiten concluir que la cepa Del-Ros es altamente segura y eficaz para lograr una rápida y consistente seroconversión de las gallinas reproductoras luego de la vacunación y durante todo el ciclo productivo. Esto permitirá una eficiente transferencia de inmunidad frente a CAV a la progenie con el consecuente control de los signos clínicos de la enfermedad.
Es importante destacar que el control de la infección subclínica por CAV también implica todas las maniobras relacionadas con la limpieza, desinfección y descanso sanitario de las granjas para minimizar la exposición al virus una vez que los anticuerpos maternos son catabolizados así como el control de otros agentes inmunosupresores, que sinérgicamente pueden aumentar la gravedad de la infección entre estos, los más comunes son la enfermedad de Gumboro, Marek o Reovirus así como la provisión de alimentos con bajos niveles de micotoxinas.
*Servicio Técnico Ceva Salud Animal.