RECONOCIMIENTO DE CALIDAD PARA EL PROCESO DE VACUNACIÓN EN PLANTAS DE INCUBACIÓN

RECONOCIMIENTO DE CALIDAD PARA EL PROCESO DE VACUNACIÓN EN PLANTAS DE INCUBACIÓN

                                                        

Lo obtuvo la empresa Ceva por su C.H.I.C.K. Program, por el cual se asegura que las vacunas para las aves lleguen al lugar de operación y se apliquen de la manera correcta, asegurando así la inmunidad de las aves.
Ceva, empresa internacional fabri­cante de productos veterinarios, ob­tuvo recientemente en la Argentina un reconocimiento de calidad por su C.H.I.C.K. Program (Ceva Hatchery Immunization Control Keys), que ga­rantiza la implementación de proto­colos de manejo y aplicación correc­ta de las vacunas en la avicultura.
A comienzos de diciembre, la em­presa presentó este logro a la prensa especializada, en Buenos Aires, du­rante un encuentro al que asistieron directivos de su subsidiaria en la Ar­gentina y de la certificadora Bureau Veritas, que otorgó el mencionado reconocimiento.
Eduardo Macchi, Gerente de Ser­vicios de Vacunación para Latinoa­mérica de Ceva, señaló que el tra­bajo para lograr este reconocimiento comenzó en 2012.

                                    
Eduardo Macchi: “El 70% del programa lo armó el cliente sobre la base de sus cuestionamientos, lo que le permitió a Ceva investigar sobre las principales problemáticas y cuestiones a mejorar en sus aplicaciones. Fue un trabajo muy rico para ambos”, destacó.

“Nos enfocamos básicamente en el C.H.I.C.K. Program que es donde nos auditaron para confirmar que los enunciados del protocolo se cum­plían”, explicó Macchi. El C.H.I.C.K. Program, cuyo objetivo es que el 100% de las aves esté correctamente vacunado, se basa en auditorías en plantas de incubación.
Antiguamente la vacunación “in ovo” no comenzaba si no había má­quinas dentro de las plantas de in­cubación. “Argentina fue el único país que inició el programa sin tener máquinas, pero sí auditando a las empresas que iban aplicando buenas prácticas. Eso se fue perfeccionando en conjunto con los clientes y así se fueron mejorando las prácticas, lo que dio mayor credibilidad y, sobre todo, seguridad al procedimiento”.
El C.H.I.C.K. Program abarca des­de la producción y la logística de en­trega de las vacunas, que se conser­van en una plataforma de nitrógeno líquido, hasta su preparación antes de ser aplicada a los pollitos.
Macchi explicó que “el mante­nimiento del programa requiere de una rutina sistemática de auditorías y monitoreo, en visitas a las plantas de los clientes, donde se auditan la preparación de las vacunas, se veri­fican las técnicas de vacunación y el mantenimiento de equipos para que funcionen al 100% de su capacidad.
Ceva no solo capacita constante­mente a su equipo técnico, sino que estas capacitaciones se trasladan a los clientes a través de charlas técni­cas en todo el país”, enfatizó.
Así, al cumplirse estos protocolos, las plantas de incubación donde se realiza la vacunación obtienen un se­llo de calidad que garantiza el cum­plimiento de los procedimientos que conforman el C.H.I.C.K. Program.
“Esto es muy importante porque en el mundo tenemos auditadas el 58% de las plantas de incubación que aplican este programa, de las cua­les 25 están en América del Norte, 198 en Latinoamérica, 82 en Euro­pa, 242 en Europa del Este, África, Medio Oriente y Turquía, y 367 en Asia”, precisó.
TRABAJO CONJUNTO
Machi 
explicó que el C.H.I.C.K. Pro­gram es una conjunción de experien­cias entre Ceva y sus clientes. “El 70% del programa lo armó el cliente sobre la base de sus cuestionamien­tos, lo que le permitió a Ceva inves­tigar sobre las principales problemá­ticas y cuestiones a mejorar en sus aplicaciones. Fue un trabajo muy rico para ambos”, destacó.
“A partir de 2013 se avanzó para obtener un reconocimiento a través de una empresa externa que nos auditara todos los procesos y nos confirmara que lo que decimos, lo hacemos. Así se creó un código de buenas prácticas, un protocolo a seguir, avalado y homologado por el cliente, para desarrollar un están­dar internacional de servicios que otorgue un reconocimiento de cali­dad auditado por la empresa elegi­da, Bureau Veritas”.
La experiencia con Bureau Veri­tas fue más allá de un protocolo de preguntas y respuestas rígido y ce­rrado. Hubo intercambio de ideas de mejoras lo que permitió dar un salto más hacia la mejora continua. Desde 2014, Bureau Veritas Francia contro­la que Ceva audite sus plantas, ba­sándose en un protocolo de buenas prácticas, que comenzó a aplicarse desde ese mismo momento.
Al cerrarse ese protocolo, en 2016, fue reconocido y desde ese año se pasó a una fase de auditoría local en cada país, que aún continúa. En 2018, comenzará el control de clien­tes de México y Argentina, y así po­der certificar el programa que ellos realizan en plantas de incubación.
“En la última mitad del 2017, el reconocimiento de calidad fue reci­bido en México Argentina. Próxi­mamente lo obtendremos en Brasil Colombia. El reconocimiento es de Bureau Veritas con Ceva, mediante las auditorías de los procesos, segui­miento de mejoras, capacitaciones y funcionamiento de los equipos ubi­cados en los establecimientos de los clientes.
El año próximo, en la fase II del proceso, Bureau Veritas auditará en la Argentina a algunos clientes de for­ma directa, de modo de establecer procesos en sus prácticas de vacuna­ción y revisar el buen funcionamien­to y mantenimiento de los equipos, como ya sucede en 17 países.
Los 4 pilares que tienen el progra­ma y su reconocimiento de calidad por parte de Bureau Veritas son:
1. Profesionales calificados dedicados al monitoreo de la vacunación; 2. Visitas regulares y reportadas que contribuyan a la mejora continua; 3. Entrenamiento continuo hacia el cliente respecto del proceso de va­cunación; 4. Programación del man­tenimiento preventivo de los equipos involucrados. “El reconocimiento de calidad otorgado es el código que se redactó para trabajar sobre estos cuatro puntos” y “el con­cepto de servicio es la unión entre la tecnología y los profesionales en operaciones”, recalcó Macchi.
Una vez realizado todo el procedimiento de auditoría por parte de Bureau Veritas en el país, la cer­tificadora emite su informe desde su casa central en Francia, se corrobora que se hayan realizado los ajustes sugeridos y luego se otorga el reco­nocimiento de calidad.
Se realizan controles anuales y si se continúa trabajando se­gún el protocolo acordado, se renueva cada 3 años. Finalmente se realiza un plan de comunica­ción ajustado a cada país, que involucra a todo el equipo de Marketing de Ceva.
“Es una manera de ofrecer una ventaja competitiva en cuanto a las plantas que ya tienen su vacunación propia”, concluyó Macchi.

Líder en avicultura
6ª empresa de sanidad animal del mundo
Ceva 
es la 6ª compañía global de salud ani­mal. Está presente en 44 países, centrada en la investigación, desarrollo, producción y comercialización de unos 2.000 produc­tos veterinarios y vacunas para rumiantes, cerdos, aves y animales de compañía. Es­tas especies son el foco de la compañía, aunque también tiene productos para equinos y mascotas. En la Argentina, es líder en productos veterinarios para aves, siguiéndole en importancia su partici­pación en el mercado de productos para rumiantes y porcinos. Más del 80% de su negocio se basa en el mercado avícola, que será la carne más consumida hacia 2023. 
                    
Para Patricio Roan, “Ceva es una nueva referencia para crear valor más allá de la salud animal” y para Martín Díaz “El diferencial que ofrece Ceva en la Argentina es el servicio y equipos de alta tecnología”. 

Patricio Roan, Director de Ceva Cono Sur, destacó que “Ceva es una nueva re­ferencia para crear valor más allá de la salud animal, por sobre lo vinculado al negocio, hacia la sociedad. Los valores son innovación, espíritu emprendedor, trabajo en equipo y pasión por el cliente. El éxito de las vacunas vectorizadas en avicultura y las que vendrán en otras especies anuncian un camino distinto y revolucionario que pretende generar valor agregado: acompa­ñar más allá de la salud animal.”, destacó.
Por su parte, Martín Díaz, Gerente Co­mercial del Área Avícola de Ceva Cono Sur, detalló que “la compañía tiene 13 centros de investigación y desarrollo y 21 plantas de producción en todo el mundo y más de 5.000 empleados”. Los más importantes son el de Budapest, Hungría, de donde provienen gran parte de las vacunas, y el de Kansas, EE. UU., además de otro cen­tro de investigación y desarrollo en Japón, donde se trabaja con genes y desarrollo de nuevos productos.
“A nivel global, las ventas provienen 87,5% de productos para avicultura, 6,7% para porcinos, 5,7% para rumiantes, y 0,2% de otros rubros. Esto va a cambiar a raíz de las adquisiciones que Ceva con­cretó en los últimos años. En los próximos, habrá nuevos e importantes lanzamientos en distintas líneas de rumiantes y cerdos con productos innovadores”, agregó.
En la Argentina, la empresa comenzó sus operaciones en 2012 con una par­ticipación en el mercado de productos biológicos para avicultura de 17,65%, que llegó a 36,95% en 2017. “El dife­rencial que ofrece Ceva en la Argentina son el servicio y los equipos de alta tec­nología, que -por supuesto- es el foco de la compañía. Ofrecemos la solución y acompañamos al cliente para asegurar­nos que su implementación sea correc­ta”, destacó Díaz.

Más información:
www.ceva.com 

Fotos: Gentileza Nicolás de la Fuente (Periódico Motivar) y Florencia Santángelo
(Cátedra Avícola).
Fuente:
Revista Solo Aves & Porcinos Nº70

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