LA PRODUCCIÓN DE CARNE PUEDE CRECER UN 50%
El dato no es menor, justo en momentos en que se habla de la posibilidad de aumentar las retenciones a la exportación de carne, como forma de controlar una trepada de los precios internos que alimente la inflación. Según coincidieron varios panelistas durante la jornada, la mejor forma de tener a raya los valores de la carne es aumentar la oferta. Fernando Canosa, coordinador de la comisión de Ganadería de AACREA, destacó que el stock vacuno está estancado hace varios años en 54 millones de cabezas. Y que, en verdad, esa es una buena noticia, porque logró sostenerse a pesar de que 8 millones de hectáreas que dedicadas a la ganadería pasaron a agricultura. El dato muestra que la ganadería aumentó su productividad, porque produjo lo mismo en menos superficie. Pero el experto afirmó que aún hay mucho para crecer. Destacó que el porcentaje de destete del país (la cantidad de terneros que se obtienen cada año sobre 100 vacas) es del 62%. Ese guarismo está muy lejos de lo que obtienen productores de punta, que superan el 90%. La hipótesis de Canosa es que, utilizando las herramientas que hoy ya están al alcance de los productores, y que muchos utilizan, podría elevarse el porcentaje de destete rápidamente al 75%. Y, así, tener 2,7 millones de terneros más por año. En ese sentido hay varios planes ganaderos lanzados por las provincias, como la de Buenos Aires, que pretende producir 1 millón de terneros adicionales para el 2007. Si, también en la etapa del engorde de esos terneros, mejorara la tecnología promedio que se utiliza (y que se detalló durante el Congreso), podría producirse en pocos años ese 50% más que las 12 millones de toneladas de carne de hoy. Y aún sin pensar en la tecnología de punta que muchos ya están implementando. El economista Pablo Lara sostuvo que justamente las restricciones en la oferta de carne son un componente clave en la presión sobre los precios. Y que la oferta no es la que podría ser porque, en los últimos 3 años, hubo liquidación de vientres, debido a que el negocio ganadero no aparecía con buenas perspectivas. Hoy, la situación se revierte, porque crece la demanda interna (consume el 80% de la producción de carne del país) y aumentan las exportaciones (el 20% restante), que llegaron a U$S 635 millones entre enero y junio. En ese contexto, sostuvo Lara, los productores vuelven a tener interés por mantener la hacienda. Y esto —agregó—, con el tiempo lógico de los ciclos productivos, es la única manera genuina de aumentar la producción ganadera y la oferta de carne.