LA CARNE ARGENTINA VOLVERÁ A ECUADOR
El servicio sanitario de Ecuador levantará en breve las restricciones al ingreso de carne bovina procedente de la República Argentina, tras recibir un informe sobre la situación sanitaria de los rodeos de ganado en nuestro país brindado por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA).La determinación ecuatoriana es el corolario de una reunión bilateral mantenida la semana pasada en ese país por una delegación argentina integrada por el embajador de nuestro país Carlos Piñeiro Iñiguez, el subsecretario de Políticas Latinoamericanas, Eduardo Sjuiglia; el director de Integración Económica Latinoamericana, Gustavo Moreno y el Coordinador de Relaciones Internacionales e Institucionales del SENASA, Rodolfo Acerbi y el consejero de la embajada, Gonzalo Torres Carioni.Por Ecuador participaron de la reunión en representación de la cancillería, los subsecretarios de Relaciones Bilaterales; de Comercio Exterior; de Recursos Pesqueros y de Agricultura; el director de Integración; el director ejecutivo del Servicio Ecuatoriano de Sanidad Agropecuaria (SESA) y el director del Instituto Nacional de Pesca.La reunión, que se desarrolló en un ambiente de cordialidad, tuvo lugar en la sede de la cancillería ecuatoriana y durante su desarrollo los representantes argentinos explicaron las acciones adoptadas tras el foco de fiebre aftosa detectado en Tartagal, provincia de Salta a principios de septiembre de este año y la óptima situación sanitaria actual del ganado en todo el territorio nacional.Asimismo, en la oportunidad Ecuador solicitó a nuestro país que levante las restricciones a la importación de atún, suspendido por el SENASA luego de detectar falencias en el control higiénico sanitario de origen.En ese marco las autoridades del Instituto Nacional de Pesca de Ecuador entregaron un documento con las correcciones efectuadas, a las observaciones realizadas oportunamente por la Argentina, el cual será analizado por la Coordinación de Pesca del SENASA. Ambos países se propusieron, a partir del 2004, reconocer los controles que realizan sus servicios sanitarios para la habilitación de establecimientos destinados a la exportación, encaminando la relación hacia un proceso de equivalencias que facilite el comercio de productos entre ambas naciones.