FAENA VACUNA, EN PICADA

Los datos provisorios suministrados por la Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario (ONCCA) "dan cuenta de una importante retracción de la faena de ganado vacuno y de los volúmenes de carne producidos, tanto en enero como en febrero de este año", destaca el documento de la entidad que preside Miguel Schiariti. En enero de 2003 se faenaron 903.711 cabezas menos que en diciembre de 2002, y en febrero pasado la faena fue de 826.714 cabezas menos que en enero lo que "para el primer bimestre del año arroja una baja acumulada de 4,3 por ciento con respecto a enero/febrero de 2002", puntualiza el informe. Al explicar el comportamiento de la faena, la entidad no descarta que "la imposibilidad de que revaluar los stocks para la liquidación del impuesto a las Ganancias" esté generando "un fuerte incentivo a la evasión y, por lo tanto, al desarrollo de la producción en negro". Asimismo advierte que la baja del poder adquisitivo "en un contexto donde los precios al consumidor subieron más de 40 por ciento en promedio desde la devaluación del peso, y que en el caso de los cortes vacunos llegó a alrededor de 80 por ciento, constituye un fuerte obstáculo para la recuperación del consumo interno de carne vacuna y consiguientemente para la actividad productiva". En este contexto el "consumo per cápita anualizado de carne vacuna se ubicó en 59,6 kilogramos por habitante" en 2002 y se mantiene con tendencia a la baja. CICCRA señalo también que con la caída del 3,8 por ciento del precio del "ganado comercializado en el Mercado Liniers" registrado en marzo pasado "el valor de la hacienda en pie acumula una baja del 8,1 por ciento para el primer trimestre de 2003". Si bien "una variación de esta magnitud debiera generar una disminución cercana al 4 por ciento en el valor de venta de la carne al público" esta vez no bajará pues cuando aumentaron los valores, como consecuencia de la devaluación, la cotización de la hacienda subió un 200 por ciento en pesos mientras el precio de carne al público creció menos del 80 por ciento. La entidad explicó que esa diferencia fue absorbida por los frigoríficos "dado el importante crecimiento del precio de los subproductos exportables en dólares" (por entonces, a 3,70 pesos por dolar) pero ahora, con la revalorización de la moneda local disminuyeron los beneficios de la industria, lo cual "hace imposible, que se produzcan bajas del precio (de venta de la carne) al público".

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