CHILE: DECLARACIÓN PÚBLICA LA ASOCIACIÓN CHILENA DE LA CARNE

En relación a las publicaciones emitidas por diferentes medios de prensa, informando sobre el comunicado oficial que hiciera la Unión Europea a Chile respecto al cambio de categoría de riesgo de contraer la enfermedad Encefalopatía Espongiforme Bovina (EEB) más conocida como Vaca Loca, por las importaciones de harina de carne y hueso proveniente desde Canadá en el período 1997-1999 y desde EE.UU. en el año 2000, la Asociación Chilena de la Carne A.G., ACHIC manifiesta que:1.- La medida tomada por la Unión Europea no refleja en lo absoluto el verdadero status sanitario de nuestro país y esta recalificación obedece únicamente a un tema comercial y administrativo, ya que el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) cuenta con los antecedentes que respaldan nuestra condición sanitaria actual. Entre las medidas que se han aplicado, se han realizado diferentes análisis a bovinos con sintomatología sospechosa, los que siempre han dado resultados negativos, prohibiéndose desde el año 2000 la importación y la alimentación de rumiantes con harina de carne y hueso. Por lo demás el tipo de alimentación del ganado chileno es esencialmente de pasturas. Lamentablemente estos hechos confunden a la opinión pública y enlodan la imagen sanitaria de nuestro país.Al respecto, ACHIC respalda absolutamente las declaraciones del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), hechas por su Director Sr. Francisco Bahamonde, quien tiene la certeza absoluta de que en Chile no existe la enfermedad, que la sanidad de los animales chilenos está garantizada y que el consumo de carne de bovino no ofrece ningún riesgo para la salud de las personas. 2.- En Sudamérica no existe el mal de las Vacas Locas. Durante el transcurso de la epidemia de EEB en el mundo (1995) y en la actualidad, Chile ha realizado una gestión de control del riesgo tal que, tanto el riesgo de introducción como de exposición ha sido insignificante y, actualmente, cumple con todas las condiciones para declararse libre de dicha enfermedad, ajustándose a las normas establecidas por el Código de Sanidad Animal de la Organización Mundial de Sanidad Animal - OIE. 3.- De acuerdo a la OIE, la enfermedad no se transmite por el consumo de carne. Las evidencias científicas acumuladas, indican que los tejidos de mayor riesgo sería el cerebro (sesos) y la médula espinal, productos que, por precaución, no se comercializarán e irán a decomiso.

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