CATTANEO FABRICA JAULAS AUTOMÁTICAS PARA AVES DE POSTURA EN LA ARGENTINA
La fabricación de jaulas es una realidad para Cattaneo desde 1997, cuando se inició con las tradicionales verticales, para postura y recría, con recolección manual de huevos, que aún todavía funcionan en aproximadamente un 50% de las granjas de postura del país.
Pero la evolución tecnológica propia de la producción, que cada vez requiere de mayor eficiencia para asegurar la rentabilidad, y las nuevas tendencias mundiales que, particularmente desde Europa, exigen nuevos y diferentes hábitats para las aves de postura, con un criterio que prioriza el bienestar animal, hizo que la empresa decidiera invertir en nueva maquinaria y adoptar tecnología que les permitiera fabricar las jaulas automáticas en el país.
Fabricante de equipamientos para aves de postura desde hace 2 décadas, Cattaneo evoluciona ofreciendo jaulas automáticas de producción argentina.
Para lograrlo, se asoció a la empresa Desait, de Pamplona, España, que les provee todo el equipamiento de automatización de las jaulas: motores, carros y cintas transportadoras de alimentos y extractoras de guano, y equipos de ventilación automática.
Cada piso cuenta con un motoreductor Desait para el funcionamiento de las cintas de recolección de huevos y retiro de guano.
Diego Cattaneo, director de la empresa, explica que “la jaula automática estándar que estamos fabricando mide 75 x 60 cm y tiene 380 cm2 por ave, con lo cual entran 12 gallinas por jaula”. Si se le quita un tabique divisorio y se le coloca una percha, se transforma en jaula automática enriquecida y se duplica la superficie, para la misma cantidad de aves. Los equipos que fabrica la empresa también brindan esta posibilidad. En Europa, por ejemplo, la normativa vigente determina que las enriquecidas deben tener 750 cm2 por ave en postura. Estas jaulas también pueden incluir un nidal.
Diego Cattaneo: “Hemos logrado una relación precio-calidad muy competitivo, y un nivel de integración adecuado entre nuestra empresa y Desait”.
A estos dos tipos de jaula, se agrega una tercera categoría que si bien Cattaneo aún no fabrica, no descarta hacer en el futuro, si las condiciones del mercado argentino o regional lo permiten.
Se trata de las jaulas convertibles en aviario, que se construyen para cumplir con las cada vez mayores exigencias sobre bienestar animal. Tienen la posibilidad de abrir puertas y colocar una percha, y permite que la gallina esté en semi-libertad. Mide 2 m de ancho por 3 m de largo y se le pueden quitar los frentes. Así, la gallina come y pone huevos dentro de la jaula, pero puede caminar en una superficie mayor a su alrededor: “La superficie por ave, depende de las normativas de cada país. En Europa se estarían manejando 6 aves x m2 de jaula. Esta es la tendencia actual en la avicultura”, relata Cattaneo.
4 TIPOS DE HUEVO
La mención de tantas clases de jaulas en la Argentina, donde aún las tradicionales manuales dan servicio a la mitad de las aves en postura y los precios del huevo, más allá de sus variaciones por tamaño o pigmentación, no se relaciona con el hábitat de las gallinas, aparece como algo ajeno o extraño.
Sucede que en Europa hay 4 calidades y valores de huevos que -en orden creciente de precio corresponden a los que se producen en jaulas automáticas estándar, los que salen de jaulas automáticas enriquecidas, los que provienen de jaulas convertibles en aviario y el huevo ecológico, cuya gallina productora tiene una alimentación especial.
En la Unión Europea esa diferencia de valor se paga y las jaulas convertibles en aviario se exigen porque grandes empresas fabricantes de alimentos como Unilever o McDonald’s buscan huevos libres de jaula, que tienen un sello que lo certifica, para fabricar sus productos o servir en sus locales.
Instalación de jaulas automáticas de 4 pisos.
-¿Cómo le está yendo a Cattaneo con el lanzamiento de estas jaulas?
– Nos está yendo bien. Tenemos proyectos contratados y en ejecución en Alta Gracia, Córdoba; Miguel Riglos, La Pampa, y Crespo, La Picada y Aldea María Luisa, Entre Ríos. Ahí estamos instalando una nave de postura en la Granja Avícola Don Francisco, del Sr. Ubaldo Roskopf. Además, hay varios otros en carpeta, con lo cual las expectativas son muy buenas, porque hemos logrado una relación precio-calidad muy competitiva, y un nivel de integración adecuado entre nuestra empresa y Desait.
-¿Qué política oficial hace falta para facilitar la instalación de las jaulas automáticas en las granjas argentinas?
-Para los fabricantes, apoyo crediticio para capital de trabajo. Pese a ser una pyme bancarizada hace muchos años, las líneas para este destino apenas cubren un 10% de las necesidades, sin contar lo engorroso de los trámites para lograr un crédito. En nuestro caso, para no desaparecer como fabricante de jaulas avícolas, tuvimos que invertir capital propio en comprar las nuevas máquinas que nos permitieran hacer las jaulas automáticas.
Actualmente, Cattaneo tiene en construcción y por construir 5 galpones de jaulas automáticas en Entre Ríos, Córdoba y La Pampa.
-¿Y para los productores?
– Que mejoren su rentabilidad. Si bien hay algunas líneas de crédito y por eso algunos se animan a comprar jaulas automáticas, en general, el margen de ganancia que les deja el valor del huevo respecto del costo del alimento es muy bajo. Si hubiera financiación de capital de trabajo, que nos permitiera financiar luego las jaulas a los productores, sería muy bueno y mejoraría sustancialmente la situación.
Más información:
www.diegocattaneo.com.ar
Fuente:
Revista Solo Aves & Porcinos Nº66