BEMIS ARGENTINA: MÚLTIPLES SOLUCIONES INNOVADORAS DE ENVASADO
El rol del envase en cualquier industria es vital para que un producto mantenga su calidad y llegue adecuadamente al mercado, en las condiciones que el fabricante quiere que lo haga y por el plazo de vida útil definido. La innovación en este rubro es clave para seguir las tendencias de consumidores cada vez más exigentes.
Los envases flexibles llamados “doypack” se utilizan para envasar y contener distintos productos alimenticios y también otros de limpieza y cuidado personal.
Envases y packaging. Dos palabras que en español e inglés, respectivamente, podrían pensarse que solo se refieren al recipiente o contenedor en el cual un producto llega al consumidor. Pero en realidad se trata de un concepto mucho más amplio. Incluye materiales, destinos, exigencias técnicas en función de procesos y de requerimientos de inocuidad en alimentos, que sus fabricantes deben tener en cuenta para ofrecer a la industria soluciones adecuadas, que aseguren la calidad y el valor de sus productos.
Bemis es una empresa multinacional, radicada en la Argentina desde 2007, que opera en todo el globo en diferentes formatos y tecnologías, a diferencia de otros jugadores a nivel global quienes se especializan solamente en un tipo de envases o tecnología.
En este sentido, Ariel Antolin, Gerente Comercial de la empresa, destaca que Bemis ofrece diferentes tecnologías adaptadas a las exigencias de los mercados y países en los cuales actúa: “diseñamos y fabricamos envases rígidos, flexibles y termo contraíbles con y sin barrera. Es un abanico amplio; esto nos permite intercambiar tecnologías y aplicaciones de un rubro a otro. De ese intercambio, muchas veces surgen innovaciones y desarrollos interesantes”.
Dentro de la cartera de productos, podemos mencionar como ejemplos a los clásicos potes para la industria láctea y otras (yogur, queso cremoso, dulce de leche, mermelada, etc.); a las bolsas y películas termo-contraíbles que se utilizan para envasar al vacío cortes de carnes frescas, embutidos, carnes procesadas y lácteos; y las soluciones de envases flexibles, que abarcan un amplio espectro de aplicaciones de envasado (productos cosméticos, químicos, de cuidado personal, limpieza y alimentos).
Ariel Antolin (Bemis): “Diseñamos y fabricamos envases rígidos, flexibles y termo contraíbles con y sin barrera. Es un abanico amplio; esto nos permite intercambiar tecnologías y aplicaciones de un rubro a otro. De ese intercambio, muchas veces surgen innovaciones y desarrollos interesantes”.
Sobre el rubro y sus clientes bien disímiles, señala Ariel, que “nos tenemos que desdoblar en ser una empresa muy eficiente en costos y en innovar, para atender a los grandes, quienes generan masa crítica, y también estar atentos a la evolución de nichos que pueden ser estrellas en el futuro”.
La empresa tiene una relación importante con la industria alimentaria, a tal punto que “el envasado de proteínas (lácteos y carnes) representa más de un 50% de la facturación”. De ese total, las carnes ocupan un 20%, siendo la vacuna la más importante, representando, un 90% de ese segmento.
Tomando el total de su facturación anual, las soluciones para envasado de proteínas al vacío representan aproximadamente el 30%.
ALIADOS PARA INNOVAR
Bemis y Outsourcing Solutions producen en conjunto este envase “doypack” utilizado por una empresa pesquera que exporta langostinos argentinos con marca de una empresa alimenticia estadounidense.
Combinando la innovación permanente con la atención de nichos de mercado de gran proyección futura, Bemis mantiene alianzas estratégicas con distintos partners para lograr esos objetivos.
Tal es el caso de la tarea que desarrolla junto a Outsourcing Solutions (OS), compañía argentina, que utilizando los materiales flexibles diseñados por Bemis confecciona las aplicaciones y acabados finales de productos para clientes de ambos.
Luis Gálvez presidente de OS, explica que su empresa se especializa en confeccionar envases flexibles preformados para la industria alimentaria, cosmética, de limpieza y de otros rubros en desarrollo, con una historia que se remonta a 2005. Desde ese año se focalizaron en envases flexibles, al percibir que los clientes los elegían en forma creciente para optimizar costos con su mayor uso. Así, montó una planta que trabaja con clientes directos y estratégicamente con Bemis, y en proyectos que desarrolla con otras empresas.
Luis Gálvez (Outsourcing Solutions): “En nuestro rubro es muy importante innovar. Estamos desarrollando envases flexibles para atún que reemplacen la lata. Será con ziper para que se pueda abrir, consumir una parte, cerrarlo y conservar el resto”.
“Hacemos todo tipo de envases flexibles terminados, por ejemplo doypacks (pouches que se mantienen parados una vez llenos, como los de mayonesa, entre otros productos). Se trata de envases que pueden mantenerse (o no) en el frezzer al ser resistentes a bajas temperaturas. OS hace el desarrollo de diseño final y la matricería para confeccionarlo”.
Por su parte, Ariel explica que “Bemis imprime en cualquier sustrato, que luego es laminado (o no) con otro/s sustratos requeridos por la aplicación final del envase o doypack (puede ser aluminio, polipropileno, polietileno o inclusive poliestireno). Estos materiales le confieren características de protección a los alimentos (resistencia a la humedad o grasas, por ejemplo) y cumplen las especificaciones que requiera cada producto.”
“Nos complementamos con OS porque en Bemis pensamos qué necesita nuestro cliente y al mismo tiempo su propio cliente, para satisfacer finalmente a los consumidores. Así, ideamos cual estructura y solución técnica de envases flexible podemos ofrecer. Es una larga cadena de diseño, porque cada envase debe satisfacer requerimientos de protección del producto -el cual tiene una propia estabilidad interna- y de funcionalidad del envase en cuanto a la su maquinabilidad: es decir que con el material que Bemis fabrique, OS lo confeccione y que el producto pueda ser envasado”, señala Antolin.
Gálvez agrega que “En nuestro rubro es muy importante innovar. Estamos desarrollando envases flexibles para atún que reemplacen la lata. Será con ziper para que se pueda abrir, consumir una parte, cerrarlo y conservar el resto. También estamos desarrollando una bolsa de frutas con ziper y manija para un cliente de Río Negro que exporta peras y manzanas a Estados Unidos.”
PROYECCION MARITIMA
Más allá de estas innovaciones ya hay un logro conjunto fruto de la asociación estratégica de ambas empresas: Meijer, la 10ª empresa productora de alimentos de Estados Unidos, aprobó un envase realizado con materiales producidos por Bemis y diseñado por OS, para una pesquera argentina que exporta langostinos congelados con ese destino, respetando estándares de calidad y diseño internacionales de la marca.
Ariel cree que hay una oportunidad importante de crecimiento en el consumo de las proteínas del mar, las cuales, por otra parte tienen una connotación positiva de comida saludable y es una cadena de muchísimo valor. “Que el producto salga envasado en un packaging con barrera, impreso desde la Argentina y congelado es muy interesante. El mar argentino tiene un potencial de crecimiento enorme y está muy bueno estar cerca de este rubro, que tiene un recorrido alcista exportador grande, aun por transitar”. Al respecto, agregó: “junto a Gálvez nos hemos asociado con empresas pymes quienes tienen potencial de crecimiento en el desarrollo y explotación de nuestro mar argentino”.
Independientemente de este y otros casos, Gálvez destaca que el envase flexible reduce el costo de una botella de PVC, PET o lata, y también permite que un producto pueda acceder a ciertos nichos de mercado, haciéndolo más económico.
Y explica que en el rubro alimentos, OS únicamente le entrega el envase (o preforma) al fabricante, quien lo aplica a su línea de producción. La máquina inyecta aire para abrir el envase, coloca el producto y lo cierra.
Todos los sustratos que se utilizan en la fabricación de los envases de alimentos deben cumplir con las exigencias de inocuidad y aprobaciones de Anmat, Senasa e Inal, tanto para el mercado interno como para exportar.
Luego se suman las vinculadas con el aspecto, color y diseño de los envases que -en los casos de empresas internacionales- deben respetar criterios globales de packaging.
Planta impresora laminadora italiana Cerutti, de 10 colores, en la planta de Bemis, en Pablo Nogués, Buenos Aires. Según las especificaciones del envase a producir, las bobinas pueden ser hasta trilaminadas en un solo paso. En estos procesos se utilizan principalmente polietileno, poliéster, aluminio y polipropileno.
Detalle de impresión sobre poliéster, primera etapa del proceso para fabricar el material con que se envasan polvos para jugos y otros alimentos.
En el sector de corte de la planta de Bemis, la bobina “madre” (de 1 m de largo), se fracciona en 5 bobinas “hijas”, a la medida pedida por el cliente.
SUSTRATOS Y TENDENCIAS
Al respecto, Antolin explica que en los últimos tiempos han cambiado las tendencias en cuanto al sustrato o diseño de los envases de alimentos. La impresión brillante o cristal está dando paso a acabados mate en la superficie de los envases,
lo cual “actualmente se relaciona con la percepción de que el producto allí contenido es más natural para los consumidores”, explica. Para lograr ese aspecto se utiliza el sustrato adecuado para imprimir o lograr la terminación en la impresora. También se trabaja en la textura en los plásticos para bajarles el brillo. Un caso interesante es el pouche utilizado para envasar snacks de frutas liofilizadas, laminado, que requiere barreras a la luz y humedad para lograr mantener las características de las frutas liofilizadas.
En tanto, Gálvez agrega que existe un material desarrollado especialmente para exportar vegetales envasados. Se trata de un envase preformado abierto arriba y abajo para que el vegetal quede expuesto, eventualmente con su raíz. Es un material que está diseñado para permitir que el vegetal respire sin generar burbujas ni empañar el pack.
Más información:
www.bemis.com
Fotos: Alejandra Colmenares Prieto
Fuente: Revista AmeriCarne Nº 121