BRASIL: SUFRE RESTRICCIONES A LA EXPORTACION DE CARNE VACUNA
A pesar que las exportaciones de carne vacuna de Brasil en 2012 alcanzaron un valor récord de U$S 5770 millones (casi un 7,3% por sobre el 2011), los envíos del segundo mayor exportador del mundo (con ventas de 1.02 millones de toneladas entre enero y octubre de 2012) se han visto afectados a raíz de las restricciones impuestas por algunos países después de que se diera a conocer un caso atípico de la enfermedad de la vaca loca; primer y único caso detectado en ese país y sucedido hace dos años.
El retraso en la notificación se debió, según explica la Organización Mundial de Salud Animal (OIE) por tratarse de una enfermedad compleja y de difícil diagnóstico. Según las declaraciones de las autoridades zoosanitarias brasileñas, se contemplaron las regulaciones nacionales y los procedimientos de rutina aplicables a casos sospechosos de enfermedades neurológicas en un país con riesgo insignificante, pero hubo algunos problemas de logística en un laboratorio nacional.
En 2012, Rusia adquirió el 19% de la carne de vacuno que vendió Brasil al exterior. Hong Kong fue el segundo y la Unión Europea ocupó el tercer lugar entre sus compradores.
Hasta el momento, Brasil no se había visto afectado por las prohibiciones de algunos importadores menores, como China y Sudáfrica, siendo que los países que imponen restricciones conformaban el 5% de las ventas.
Sin embargo, la Asociación Brasileña de Industrias Exportadoras de Carne (ABIEC), confirmó que Japón, Corea del Sur, Egipto y Arabia Saudita se han sumado a lo que se interpreta como “bloqueo comercial”. Además, recientemente, Chile (para algunos productos), Jordania (sólo para las exportaciones del estado de Paraná), Perú y Líbano también han comunicado a Brasil la suspensión de compra de ganado vacuno y sus productos.
Ante la situación, el gobierno brasileño se ha embarcado en una ofensiva diplomática para demostrar que sus exportaciones de carne de vacuno son seguras; luego que la Organización Mundial de Salud Animal (OIE) manifestara que se trató de un caso atípico de encefalopatía espongiforme bovina (EEB) y precisara que el animal no había muerto por esa enfermedad.
Además, el organismo mantiene en Brasil la categoría de país con riesgo “insignificante” del mal de la “vaca loca”, es decir, la categoría más favorable. Y ha manifestado a través de un comunicado que “hasta el momento, no hay motivo para suspender el estatus de riesgo”. Se espera que en la próxima reunión de la Comisión Científica para las Enfermedades de los Animales, en febrero de 2013, se examinen y debatan los aspectos epidemiológicos de este caso.
Si bien el gobierno brasileño había anunciado que esperaría hasta el mes de marzo para denunciar el cierre de mercados por esta razón, la ministra de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior de Brasil, Tatiana Prazeres, ha asegurado que el Gobierno estudia recurrir a la Organización Mundial del Comercio (OMC) en la próxima rueda de prensa sobre el resultado de la balanza comercial de 2012.
El Gobierno de Dilma Rousseff activó una campaña de información para evitar el efecto dominó y la medida se extienda a otros importadores o los lleve a reclamar una rebaja de precios que afectaría a otros proveedores.
Brasil espera hacer crecer sus exportaciones de carne vacuna en un 10% para el 2013, aumentando la producción con el propósito de alcanzar los mercados abiertos en Estados Unidos y Europa, donde los rebaños disminuyen.