BIZERBA: DE LAS CARNES Y LOS PRODUCTOS FRESCOS A LOS NO PERECEDEROS, CON PRECISION Y EXCELENCIA
Caracterizada históricamente como líder en sistemas de pesaje, Bizerba, compañía alemana global, es actualmente una empresa que ofrece soluciones integradas a nivel comercial e industrial para la alimentación y la gastronomía, incluyendo la identificación, el control y la trazabilidad de los procesos.
Con el lema “from farm to grill”, la empresa -cuyos equipamientos y soluciones estuvieron y siguen relacionados con los productos frescos, particularmente la carne- está enfocada en los últimos años en los alimentos no perecederos, un mercado de mayor expansión.
Así lo explica Juan Joaquín Rinke, Director Gerente de Bizerba Argentina, filial fundada en el año 2000, de la cual depende la operación en Sudamérica, a excepción de Brasil y Venezuela. “El grupo posee un amplio ‘know how’ y es uno de los principales jugadores en el mundo de los controles de pesos en tiendas, y en todo lo relacionado a inspección”. Es un rubro al que se ha enfocado muy fuertemente en los últimos años, porque “es un requerimiento cada vez más puntual del mercado internacional y porque los sistemas de calidad van cada vez hacia un enfoque de excelencia, lo que es muy importante para la Argentina, en cuanto a sus aspiraciones de incrementar sus exportaciones”, señaló.
Juan Joaquín Rinke y uno de los equipos que Bizerba fabrica y comercializa.
Bizerba es tecnológicamente líder en sistemas de pesaje, tanto comercial como industrial. Fue la creadora de la balanza calculadora de precios mecánica, a fines de los ’60, que evolucionó a su versión electrónica, en los ’70. En estos equipos de pesaje estático, estuvo muy presente en el sector supermercadista argentino. “Hace 3 años que no estamos en ese mercado, por no lograr las aprobaciones de metrología legal para nuestros nuevos modelos de balanzas. Esto sucede porque la legislación argentina no prevé balanzas que tengan las características tecnológicas de nuestros equipos”.
Rinke explica que internacionalmente se reemplazó el concepto de software general de aplicación por un software metrológico, que convierte la información analógica en digital y la utiliza. Hay métodos para que ese ámbito metrológico esté totalmente bloqueado, es decir que no se puede alterar. Al crecer las aplicaciones de un mismo usuario en las balanzas electrónicas, se han separado como concepto. En la legislación argentina esto no está previsto ni se ha actualizado, razón por la cual no se contempla la incidencia del software en este tipo de equipos, que es un componente muy importante.
“Si se tiene un software de una balanza apoyado sobre Windows o Windows CE, cada vez que se actualiza un antivirus, implicaría una nueva aprobación metrológica por parte de los organismos estatales argentinos, porque se ha modificado el software de ese equipo. Eso es inadmisible en la tecnología moderna y lamentablemente no tiene solución con la legislación argentina actual”, señala Rinke, aunque aclara que la situación abarca a todas las empresas del rubro, a excepción de una que sigue comercializando sus equipos en la Argentina, con un modelo anterior aprobado y con el software sin alterar ni modificar.
Lo mismo sucede con las balanzas industriales, en equipos de pesaje estático no automáticos, donde hay terminales industriales de Bizerba que no se aprueban en la Argentina por el mismo inconveniente legal referido al software.
PESAJE DINAMICO
No obstante, la empresa está muy bien posicionada en el mercado argentino en los sistemas de pesaje dinámico. Se trata de un dispositivo de transporte montado sobre un sistema de pesaje, sin detención del producto en el proceso, que se pesa a través de la integración de múltiples pesadas realizadas durante el transporte del producto, a la salida de una envasadora o de las líneas de producción.
“Esos datos son digitalizados y la información es procesada por procesadores muy rápidos, que transforman ese pesaje analógico en un dato digital, con todas las herramientas de software y comunicación inherentes al proceso. En este mercado de pesaje dinámico ‘check way’, pesaje de control, y en pesaje y etiquetado de productos estamos muy presentes, porque no hay limitantes a nivel legal. Nuestro fuerte es el pesaje de unidades de empaque, hasta pallets completos en todos los rubros industriales”, señala Rinke.
Al respecto, destacó una presencia importante de Bizerba en la industria cosmética, parcialmente en la industria farmacéutica y la mencionada expansión hacia la industria alimenticia no perecedera, que normalmente trabaja con pesos fijos. “De ahí la importancia del pesaje dinámico en su concepto de pesaje de control: se toma el producto, se verifica su peso neto y se puede proceder rechazándolo por sistemas neumáticos o mecánicos, o clasificarlo por grupos de peso, entre otras opciones”, precisó.
El portfolio de productos de Bizerba se diferencia en “retail systems" (sistemas comerciales), que a su vez se dividen en las balanzas comerciales y la línea de máquinas procesadoras de carnes y de alimentos en general, donde el fuerte de la empresa es la línea de cortadoras de fiambres, con modelos manuales, semiautomáticos y automáticos. Estas se dividen en las cortadoras destinadas al mercado del catering o supermercados, y las industriales.
Estos equipos son de mayor capacidad de producción. Bizerba es la única empresa en el mundo en proveer una cortadora de fiambres automática de alta producción con pesaje dinámico incorporado. Esto le reduce a la industria el llamado “gift away” o producto regalado, al disminuir en las porciones de feteado la incidencia de fluctuación que hay en el producto, cuando no es totalmente regular. Al tener celdas de carga incorporadas a la cortadora y con la electrónica e informática, se manejan las estadísticas de corte y se uniforma el peso de las porciones, lo que le permite a la industria reducir el porcentaje de producto que tienden a regalarle al consumidor, simplemente para estar por sobre el valor mínimo o manejando la tolerancia mínima de error permitida por Lealtad Comercial. “Uno de nuestros nuevos desarrollos, también hecho a través de software, es lograr la porción individual con peso exacto, que se verifica al momento del corte”, mencionó Rinke.
INDUSTRIA, ETIQUETAS Y EXPORTACION
El área industrial de la empresa se divide en los equipos de pesaje estático y dinámico. De estos últimos, cuenta con sistemas de pesaje y etiquetado, y los de control de peso o “check way”. A estos se suman dos áreas adicionales: intralogística (finales de línea) e inspecciones, primordialmente con sistemas de detección de metales, aunque también hay incorporadas líneas de inspección visual, control de sellado de bandejas de envasado al vacío y de ubicación de etiquetas en los productos.
Rinke agrega que Bizerba adquirió la empresa francesa Luceo, líder mundial especializada en la verificación de calidad de los envases, y que también es proveedora de etiquetas autoadhesivas termosensibles. “Fabricamos los equipos impresores de etiquetas, de aplicación manual o automática, y las etiquetas de marca propia con materiales muy especiales en nuestra planta en Alemania y en otras que tenemos en Estados Unidos, Italia y Austria”.
Explicó que Bizerba tiene un material que permite no solo garantizar la permanencia de la impresión en las cajas de carnes rojas refrigeradas por 1, 2 o más meses, sino que -por la característica del adhesivo- permite etiquetar cajas que luego serán congeladas, logrando adherencia por 1 o 2 años de vida útil del producto congelado. “No se usa tinta. Son procesos de tratamiento térmico del material. Trabajamos la impresión termo-directa. Imprimimos directamente sobre esos materiales que tienen el tratamiento superficial. Si bien todos los equipos tienen la capacidad de usar los sistemas de termo transferencia (ribbon/ cinta), para determinadas aplicaciones se recomienda la termo-directa, porque reduce los costos”, explicó Rinke.
Más información:
www.bizerba.com
Fuente:
Nota publicada en la Revista AmeriCarne N°116