AMERICARNE 77: HOMENAJE LOS 80 AÑOS DE ALBERTO CRIPPA

AMERICARNE 77: HOMENAJE LOS 80 AÑOS DE ALBERTO CRIPPA
El 25 de junio de 1930 nació Alberto Crippa. Fue el primer hijo de un matrimonio de inmigrantes italianos que buscó en Buenos Aires el trabajo y la tranquilidad que escaseaban en Europa.
En 1944 su padre, Herminio, se empleó en el Establecimiento Bulldoser. En ese taller se preparaban las piezas para fabricar el avión Pulqui. Allí ingresó como aprendiz Alberto. Tenía 15 años. Después, en la firma Domingo Rossi, aprendió tornería de precisión. Se hizo ducho en la fresa, la limadora y el torno. Mientras tanto Hermino tramitó un crédito en el Banco Industrial. Con 5.000 pesos compró un torno brasilero, una máquina de agujerear y armó la pequeña tornería en el comedor de su casa.
En 1947 Alberto comienza a trabajar tiempo completo en el emprendimiento del padre, con su hermano menor. En el fondo de la casa construyen el taller y constituyen la sociedad Herminio Crippa e Hijos.
 
TIEMPO DE TRIPEROS
Al taller del pasaje Cristóbal M. Hicken llegó un día Pedro Vicente, un amigo del barrio. Necesitaba reparar unas máquinas británicas de tripería. La familia Crippa comenzó a especializarse en este rubro, que tenía mucha demanda unas cuadras más arriba, en el corazón de Mataderos. Ya en los 70 y con Herminio jubilado, Crippa Hermanos se expandió, adquiriendo una nueva propiedad sobre el mismo pasaje, para ampliar el taller. Repuestos de todas las máquinas del mercado, bateas de virado, líneas de clasificación y calibrado, tornería de alta precisión, ejecuciones especiales, trabajos bajo plano. Nada quedó librado al azar. En 1982, cuando estalla la guerra de Malvinas, las máquinas británicas comienzan a escasear, y los repuestos resultan difíciles de conseguir. Entonces los hermanos Crippa fabrican y mejoran en cuatro puntos la tecnología británica. Se inicia así la etapa de fabricación, con una calidad y rendimiento reconocido en el país y en América Latina.
Hoy, hace 64 años que abastecen con maquinarias al sector cárnico. Alberto sigue al frente de la empresa, y constituye la sociedad con su hijo. La firma se denomina Alberto y Daniel Crippa S.R.L. Construyen la totalidad de las máquinas y tienen una amplia gama de repuestos y accesorios. Sus diseños permiten optimizar el tratamiento del subproducto, conservando la calidad durante todo el proceso.
No sólo venden e instalan equipos, sino que garantizan el funcionamiento y entrenan al personal de las plantas industriales para el uso de la maquinaria frigorífica.

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